La portavoz del PCTV admite que asumieron postulados de una lista ilegal
Erauskin declara en el Supremo que les pidieron defender sus planteamientos
Nekane Erauskin, parlamentaria del Partido Comunista de las Tierras Vascas, (PCTV) reconoció ayer, a preguntas de la Sala Especial del Tribunal Supremo, que asumieron algunos de los postulados de Aukera Guztiak (AG) cuando esta corriente ya había sido ilegalizada y no se podía presentarse a las elecciones. Pillada de sorpresa por la única pregunta inteligente que se formuló en la tarde de ayer, dirigida desde el tribunal y leída por su presidente, Francisco Hernando, la primera de las nekanes, citadas como testigos, reconoció que cuando AG entró en contacto con el PCTV ya sabían que el Tribunal Supremo les impedía presentarse a las elecciones de 2005, pese a lo cual, estuvieron de acuerdo con sus postulados.
El fiscal Antonio Narváez, a preguntas del presidente, tachó a la testigo después de haberla interrogado por considerarla "parte interesada". Lo mismo hizo con los tres testigos siguientes (la parlamentaria Kattalin Madariaga, la asesora Mireia Unamuno, y el tesorero Javier Ramos), aunque al menos a éstos los tachó antes de interrogarlos.
Erauskin, a preguntas de la abogada Jone Goirizelaia, integrante de la Mesa Nacional de Batasuna, explicó que en el encuentro con AG les pidieron que asumieran sus postulados y ellos se comprometieron a defender el "cambio social" y la necesidad de "conseguir la paz".
Enfermera de profesión, dijo que se enroló en el PCTV por su oposición a la política sanitaria del Gobierno vasco, pero sostuvo que nadie de Batasuna les dio nunca ninguna orden. Se quedaron muy sorprendidas de la cantidad de ayuda económica que recibieron y del resultado electoral, pero a quienes les ayudaba no les preguntaban de dónde procedían.
Gente de Batasuna
A base de no preguntar, el partido y el grupo se les llenó de gente de Batasuna, como el jefe de prensa, Peio Álvarez, o el responsable de Internacional, Joseba Álvarez, contratados sólo por su "idoneidad" y "capacidad profesional". Cuando la policía la encontró en compañía de Joseba Permach fue por casualidad y porque a éste el coche le había dejado "tirado".
En la sesión de la mañana, correspondiente a ANV, los testigos de esta formación se dedicaron a vender la Red del Tren Social que propugna la izquierda abertzale como alternativa al AVE vasco. Los interrogatorios adquirieron por momentos tintes surrealistas. Contagiados del fervor ferroviario de los testigos, el fiscal y el abogado del Estado plantearon que el País Vasco ya tiene un tren de cercanías o preguntaron si la plataforma del tren social pertenecía a la Coordinadora Agraria, la COAG. Allí nadie preguntaba por los atentados de ETA al Tren de Alta Velocidad ni si ANV o sus testigos, varios de ellos alcaldes, condenaban los atentados. Sólo en una ocasión el fiscal se refirió a ETA. Preguntó al alcalde de Legorreta (Guipúzcoa) si había dicho: "Haremos todo lo posible por impedir el tren de alta velocidad". "¿Se le calentó un poco la boca?", preguntó el fiscal Narváez. "Es que la frase coincide con otra de ETA y Batasuna". El alcalde, Iñaki Oyarbide, se apresuró a asegurar que aquello lo dijo en euskera "y con la traducción pierde". En realidad había querido decir que "nos esforzaremos" para que el TAV, etcétera.
La única baza ayer para la fiscalía fue el alcalde de Itsasondo, Xabier Iturrioz. Ha pasado por tantas formaciones abertzales que cuando el fiscal le preguntó si además de alcalde de ANV había estado en otro partido, respondió: "No me acuerdo". Pero esta vez el fiscal le sacó que había estado en EHAK, AG y Euskal Herritarrok, antes de ANV.
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