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Reportaje:25º aniversario de la Asamblea de Madrid

Aguirre aparca su medalla

La presidenta regional renuncia a la distinción de la Asamblea al enterarse por EL PAÍS de que ésta modificó su normativa para otorgársela en el 25º aniversario

Soledad Alcaide

Quedaban pocos minutos para el comienzo del pleno extraordinario de la Asamblea, en el que los tres ex presidentes de la Comunidad de Madrid iban a recibir una medalla de oro con motivo del 25º aniversario de la Cámara, cuando el rumor corrió por los pasillos del hemiciclo: Esperanza Aguirre, la actual presidenta, renunciaba a aceptarla.

Poco después lo confirmó el propio vicepresidente primero, Ignacio González, que aseguró durante la rueda de prensa del Consejo de Gobierno, celebrada en la Asamblea, que Aguirre, pese a sentirse "muy honrada" por la distinción, había decidido posponer su recogida, hasta que "deje de ostentar responsabilidades como presidenta de la Comunidad de Madrid". El vicepresidente subrayó que la decisión de otorgar la medalla había sido una decisión "independiente y autónoma" de la Asamblea.

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Esa misma mañana Aguirre se había enterado por EL PAÍS de que la Mesa de la Cámara, a propuesta del PP, que tiene la mayoría, había modificado tan sólo tres días antes la normativa que establece el régimen de concesión de las medallas. De esta forma podía incluir a Aguirre en el acto, junto a sus antecesores en el cargo, Joaquín Leguina (PSOE) y Alberto Ruiz-Gallardón (PP). Hasta ahora sólo recibían esta distinción quienes ya habían finalizado su mandato, como la ex presidenta de la Cámara, Concepción Dancausa. Así lo imponía un acuerdo de 20 de diciembre de 1999 de la Mesa de la Asamblea.

La noticia cayó como un jarro de agua fría en la reunión del Consejo de Gobierno, que se celebró por la mañana, antes del pleno. Para entonces la presidenta había decidido no recoger la medalla -por no considerarlo "elegante"- y así lo anunció a sus consejeros. Luego, se lo comunicó a la presidenta de la Asamblea, Elvira Rodríguez.La medalla de Aguirre se convirtió en la comidilla de la Asamblea desde primera hora de la mañana. Diputados de la oposición bromeaban en los pasillos con la posibilidad de que ya se hubiera encargado el retrato la presidenta de la Cámara, Elvira Rodríguez, ya que también es un honor que se reserva para los presidentes salientes y que se cuelga en los pasillos del hemiciclo años después de su mandato.

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Había quien se preguntaba si la medalla significaba la constatación de la siempre omnipresente supuesta marcha de Aguirre a la política nacional en sustitución del presidente del PP, Mariano Rajoy.

Los servicios de prensa de la Cámara se aprestaron a defender que no había ningún cambio de normativa, para salvar la cara a la Mesa, presidida por Elvira Rodríguez (PP) y artífice de la decisión. Una portavoz de la Asamblea aseguró que la de oro es una medalla de nueva creación y, por tanto, se trataba de una nueva regulación. "No ha habido ninguna modificación de la normativa", insistió.

Sin embargo, el escrito de la Mesa del pasado 9 de junio, registrado al día siguiente, afirma: "La Mesa de la Asamblea acuerda aprobar la propuesta de modificación del capítulo segundo del acuerdo de la Mesa de 20 de diciembre de 1999 sobre el escudo y la medalla de la Asamblea". Este documento recoge cinco nuevos artículos (del cinco al nueve del capítulo segundo) referentes a la concesión de medallas. La diferencia con el acuerdo anterior es que elimina la referencia a que no pueden recibir la distinción los cargos que estén aún en activo.

Fuentes del PP achacaron la decisión de cambiar la normativa al ansia de los miembros de la Mesa por agradar a su presidenta, lo que les había llevado a extralimitarse.

Aguirre, que siguió con una sonrisa el transcurso del pleno y la imposición de las medallas a los seis ex presidentes de la Cámara, a los siete ponentes del Estatuto de Autonomía y a sus dos antecesores, quiso justificarse en su discurso. "El trabajo de los políticos está sujeto a la fiscalización de los ciudadanos y la opinión pública", afirmó la presidenta regional. "Ello me obliga, como es lógico, a dilatar el acto de aceptación hasta que se terminen mis responsabilidades".

Las portavoces de la oposición se mostraron satisfechas con la rectificación de la presidenta. "Es una decisión correcta y adecuada", afirmó Maru Menéndez, del PSOE. "La Mesa nunca debió plantear la concesión de una medalla a una presidenta en el ejercicio de sus funciones". "Modificar la normativa anterior de la Mesa es una barbaridad", afirmó Inés Sabanés, de IU. "Ella misma ha reconocido el error y ha rectificado". No había otro remedio.

Joaquín Leguina y Alberto Ruiz-Gallardón (en primera fila) siguen el pleno extraordinario ante las filas del Gobierno regional.
Joaquín Leguina y Alberto Ruiz-Gallardón (en primera fila) siguen el pleno extraordinario ante las filas del Gobierno regional.ULY MARTÍN

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Sobre la firma

Soledad Alcaide
Defensora del Lector. Antes fue jefa de sección de Reportajes y Madrid (2021-2022), de Redes Sociales y Newsletters (2018-2021) y subdirectora de la Escuela de Periodismo UAM-EL PAÍS (2014-2018). Es licenciada en Derecho por la UAM y tiene un máster de Periodismo UAM-EL PAÍS y otro de Transformación Digital de ISDI Digital Talent. 

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