La huelga de camiones en Francia, otro desafío para las cooperativas agrícolas

El transporte valenciano recuperó ayer el pulso tras la intervención, esta vez sí, abrumadora y disuasoria de las fuerzas de seguridad sobre los piquetes que bloqueaban los grandes centros de distribución de alimentos, productos industriales y combustible. El fin del cerco permitió un progresivo reabastecimiento de los establecimientos. La excepción fue el puerto de Valencia, que la asociación Transcont consiguió mantener casi absolutamente cerrado.

La carrera para intentar recuperar el tiempo perdido fue especialmente trepidante en el caso de las cooperativas agrarias valencianas, que han visto como sus competidores internacionales ocupaban su puesto en el mercado europeo. Y que se enfrenta a una nueva amenaza: el lunes empieza la huelga en Francia. La prioridad es conseguir transporte para sacar antes del viernes por la tarde el máximo del género que se ha almacenado estos días en las cámaras frigoríficas y la parte de cosecha de frutas y hortalizas que quedan en el campo.

Durante los cuatro días de huelga, en los que el campo valenciano ha perdido diariamente dos millones de euros y unos 8.000 jornales, los proveedores holandeses, italianos y griegos se han posicionado sobre la cartera de clientes europeos de las cooperativas agrarias valencianas. Ayer se trataba de recuperar "el espacio perdido", según indicó Enrique Bellés, presidente de la Federación de Cooperativas Agrarias de la Comunidad Valenciana, recomponiendo el contacto y los pedidos. "Todo lo que no logremos sacar antes del viernes por la tarde ya no podrá pasar", explicó BellésEn la producción industrial, la factoría Ford de Almussafes retomó ayer la actividad en la planta de montaje, carrocería y pintura a partir del turno de la tarde, tras haber recibido suministro de complementos durante la mañana en camiones que llegaron desde La Jonquera e Irún. La compañía, que tuvo que interrumpir la cadena de producción el miércoles por la noche ante el desabastecimiento de materiales, presentó un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) ante la dirección General de Trabajo de la Generalitat que afecta a unos 3.000 operarios.

Fuentes de Ford explicaron ayer que si se recupera la normalidad, la regulación solo se aplicaría sobre los turnos afectados. Los sindicatos mayoritarios han exigido que esta medida no suponga una merma salarial para los trabajadores ya que no se ha tratado de una huelga, sino de "un paro patronal". La factoría, que también pudo mantener la actividad en el turno de noche, tiene previsto continuar hoy la producción.

Otras empresas, sin embargo, decidieron ayer interrumpir la actividad pese a la reactivación de la distribución. Es el caso de Dulcesol, que paró la producción en sus dos fábricas de Gandia y Villalonga por los problemas de abastecimiento. Fuentes de la empresa, dedicada a la fabricación y comercialización de pastelería y bollería industrial, anunciaron que mantendrán hoy la medida a la espera del desarrollo de los acontecimientos. La firma emplea en estas dos plantas de producción a unos 1.500 trabajadores, informa Eva Batalla.

En el sector cerámico la situación se acercó ayer a la normalidad. Al descenso de la actividad de los huelguistas durante la jornada del miércoles se unió ayer el inicio del suministro en empresas azulejeras y en el puerto de Castellón, mientras que continuó la fluida entrada y salida de camiones desde las instalaciones de la Compañía Logística de Hidrocarburos, con lo que el abastecimiento a las estaciones de servicio está prácticamente normalizado.

Pese a ello, fuentes de la patronal azulejera, Ascer, indicaron que la situación "dista mucho de estar totalmente normalizada" y, aunque afirmaron que "hay un elevado número de empresas que ha tenido que suspender temporalmente su actividad", no pudieron cifrar cuántas, si bien admitieron que algunas de ellas han comenzado a recibir aprovisionamientos de materias primas.

Las mismas fuentes indicaron que los cuatro expedientes de suspensión temporal de contratos de trabajo que afectan a un centenar de trabajadores, siguen en marcha aunque, según fuentes sindicales, solo uno se ha presentado ante la Inspección de Trabajo. La patronal cerámica alega además que en el puerto de Castellón ya circulan camiones con contenedores, pero "todavía no se ha reanudado el tráfico de arcillas, en manos de los transportistas autónomos aún en paro" y también alertaron del paro convocado para el lunes en Francia que, según vaticinaron, "dificultará el restablecimiento de la exportación por carretera". Europa es el principal mercado de la industria cerámica de Castellón.