El Inter se encomienda a Mourinho
El club italiano ficha al luso por nueve millones anuales con la vista puesta en la 'Champions'
"Benvenuto, míster Mourinho", clamaba ayer la página web del Inter. El club de Massimo Moratti hizo oficial lo que se comentaba desde hace días. El pasado viernes, el presidente y el técnico portugués ya fueron fotografiados juntos a la salida de un restaurante en París. Acababan de sellar el acuerdo que sentará al ex del Chelsea en el banquillo de San Siro las tres próximas temporadas. La boda entre el técnico con más glamour de Europa y el club más derrochador del mundo ha tenido un desenlace económico sin antecedentes. Mourinho, de 45 años, cobrará anualmente 9 millones de euros netos, casi el doble de lo que se embolsaba (5,5) en el club londinense y de lo que ganaba su predecesor, Roberto Mancini (5). Lleva casi un año de vacaciones -en septiembre de 2007 se marchó de Stamford Bridge por problemas con el dueño del Chelsea, Roman Abramóvich-, pero sigue siendo el entrenador mejor pagado.
Mourinho aporta al Inter, campeón del calcio en los tres últimos cursos, su caché europeo. En 2002 ganó la Copa de la UEFA con el Oporto y en 2003 le llevó a conquistar la Liga de Campeones. Las dos únicas Champions del Inter se remontan a 1964 y 1965, la época de Helenio Herrera, Facchetti y Luis Suárez. En esta campaña fue eliminado en los octavos de final.
"¿Antipático? En absoluto. Es un gran profesional y todos lo iréis descubriendo poco a poco", dijo Ernesto Paolillo, administrador delegado del Inter. Lo de la antipatía no es casual. Primero, porque el anterior entrenador, Mancini, no encabezaba las clasificaciones de los más amados. Y segundo, porque, en un sondeo de La Gazzetta dello Sport, los aficionados votaron en contra del fichaje del luso por su carácter. Por si acaso, Mourinho lleva semanas estudiando italiano -cinco horas diarias, dicen- y lo pondrá a prueba hoy en su presentación.
Mou, como ya hizo en el Chelsea, contará con sus tres hombres de confianza -Rui Farias, Silvino y Andrei Villas- y se apoyará en un segundo que "conozca el ambiente". A su lado se sentará Giuseppe Baresi, histórico terzino del Inter.
A Moratti el capricho le ha salido caro. Prescindió de Mancini, con el que había ganado tres Ligas -dos en el campo y una en los despachos-, por "las declaraciones que hizo tras la eliminación de la Champions ante el Liverpool", decía el comunicado. Esa noche, Mancini dijo: "A final de temporada, no seré el técnico del Inter". Moratti entendió que eso dañaba la imagen y enrarecía el ambiente en un momento clave. Ésa es la explicación oficial. La extraoficial es que el presidente sabía que la mitad del vestuario no le aguantaba. Han sido frecuentes los momentos de tensión vividos con algunos jugadores, como Figo, Adriano e Ibrahimovic, q ue afirma ahora: "Mourinho es un gran técnico y todos lo sabemos. El presidente ha hecho bien".
Así que, mientras Mourinho diseña el plan de trabajo, Mancini, que había firmado hasta 2012, ha anunciado que reclamará incluso el último céntimo. "Los contratos están para cumplirlos", declaró su representante. En danza, unos 28 millones.
Mourinho es el entrenador más famoso del mundo en lalistaWIP
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.