Cabedo califica de "paupérrimas" las condiciones de la fiscalía
Carceller reclama más medios humanos y materiales para la institución
No dejó pasar la ocasión. Ricard Cabedo, fiscal superior de la Comunidad Valenciana, calificó ayer de "paupérrimas" las condiciones en las que trabaja la institución y reclamó "medios materiales y humanos" como un elemento fundamental para "hacer las cosas bien".
Cabedo hizo esas manifestaciones en el acto de imposición de la cruz de San Raimundo de Peñafort a Javier Carceller, fiscal jefe provincial de Castellón, y a Enrique Remón, fiscal coordinador de Alzira. Carceller fue el primero que en el acto de ayer reclamó más medios humanos y materiales para contribuir a un trabajo eficaz de la institución. Y en ese acto, al que en representación de la Administración valenciana acudió el director general Justicia, Antonio Gastaldi, también fiscal, Cabedo afirmó que "en este zarandeo a la Justicia, a la que se quiere más por manceba que por esposa, es bueno resaltar que teniendo medios y las instalaciones adecuadas las cosas se pueden hacer bien". Y agregó: "Si se puede, se debe hacer".
El fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana afirmó que el trabajo de los fiscales y el de la justicia en general se hace en dotaciones insuficientes, con formación menuda y sin medios. Reconoció los esfuerzos de la consejería pero también afirmó que "reparan una herencia aceptada a beneficio de inventario".
Cabedo, que reconoció expresamente los méritos de ambos condecorados, de los que dijo sentirse "orgulloso", recordó que a pesar de las necesidades, en el caso Maeso hubo una sala especial para la celebración del juicio, dos fiscales trabajando juntos y posibilidad de manejar bases de datos. Eso contrasta con las impresiones que está recogiendo de sus visitas a los partidos judiciales, en los que se encuentra con que la fiscalía está, como en Vila-real, encima de un mercado y junto a los calabozos, que no tiene ningún espacio propio, como en Sueca, o que comparte dependencias con el archivo o con los abogados en diferentes partidos judiciales, que la mejor dotación tecnológica en algún juzgado es un ordenador roto.