Touriño afirma que el sector primario está mejor que nunca
El presidente admite que hay que mejorar la red ferroviaria
El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, aseguró ayer en el Parlamento que tanto la ganadería como la pesca cerraron el año 2007 con las mejores cifras económicas de los últimos años, a pesar de haber tenido que hacer frente a un gran incremento de costes como consecuencia del encarecimiento de los combustibles, los fertilizantes y los piensos.
Touriño, que volvió a referirse a la situación económica en términos de "desaceleración" y no de "crisis", negó en el Parlamento que las 100.000 familias que viven del sector primario estén hoy peor que hace tres años, como sostiene la oposición.
La cuestión fue planteada por el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que volvió a elegir la mala situación económica como argumento de su pregunta en la sesión quincenal de control al presidente. El responsable de la oposición reprochó al Gobierno central su falta de atención a los problemas de la agricultura y de la pesca, que personificó en la decisión de "suprimir" el ministerio que se ocupaba de este sector e integrarlo en el de Medio Ambiente, cuando ganaderos y pescadores viven "uno de los peores momentos de los últimos 25 años".
Touriño negó la argumentación de Feijóo y explicó que el incremento de costes del sector primario guarda relación directa con el alza del precio del petróleo, cuyas causas son internacionales y, por tanto, no pueden achacarse a la Xunta. "Predicar el desastre", sentenció Touriño, es una estrategia que "no se sostiene" porque 2007 fue el mejor año en mucho tiempo para el sector primario, hasta el punto de haber servido para "cambiar de raíz" la situación de las rentas de agricultores y pescadores. La tasa de crecimiento del valor añadido bruto de la agricultura y de la pesca, que en 2003 y 2005 registraba valores negativos, aumentó un 1,9% en 2006 y un 2,3% en 2007, dijo.
Feijóo acusó de inacción al Gobierno y a su presidente, al que calificó de "reina madre" por insistir en que las causas de la crisis son internacionales. La Xunta, dijo, es responsable de hundir la acuicultura y los sectores lácteo y cárnico, y no hace nada para corregir los problemas, como poner en marcha un fondo de garantía para el gasóleo.
En la misma sesión, pero en respuesta a una pregunta del nacionalista Carlos Aymerich, el presidente de la Xunta, admitió la importancia del deterioro de las instalaciones ferroviarias en Galicia. Después de años de abandono, las líneas de ferrocarril necesitan una mejora "en profundidad", y las inversiones del Estado no son suficientes.
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