Telefónica cumple sus objetivos en el trimestre
Telefónica sigue siendo un alumno aplicado. Presume de ser la única gran operadora que cumple desde hace años con las previsiones que ofrece, sin tener que rectificar a la baja a mitad de año través de los temidos profit warning. En el primer trimestre también cumplió, aunque sólo gracias a la letra pequeña.
El beneficio creció el 22,4% hasta 1.538 millones. Sin embargo, la facturación aumentó sólo el 1,1%, hasta 13.896 millones, lo que supone el crecimiento más bajo en casi cinco años. La fortaleza del euro se come parte de los ingresos. Al descontar las variaciones de tipos de cambio y efectuar otros ajustes, el crecimiento orgánico es del 7%, en el centro de la horquilla prometida. El 5,3% que sube el resultado bruto de explotación tampoco cumpliría el objetivo (7,5%-11%) pero lo hace gracias a los ajustes.
La multinacional finalizó el mes de marzo con 233,5 millones de clientes, lo que supone un crecimiento del 12,9%, con expansión en todos los segmentos menos la telefonía fija: accesos móviles (+16,3%), banda ancha (+26,8%) y televisión de pago (+64,4%). Por mercados geográficos, Latinoamérica fue el que más contribuyó al crecimiento, con un 37,5% del total de ingresos.
Telefónica adelanta en seis meses el plazo de finalización del plan de recompra de 100 millones de sus acciones (2% del capital), que concluirá a fines de este año, y del que ya se ha completado el 35,7%.
El consejero delegado de Telefónica, Julio Linares, aseguró que mantendrá los acuerdos comerciales con Sogecable, el grupo audiovisual del que controlaba un 16,7% del capital, que ha vendido en la oferta pública de adquisición (OPA) presentada por PRISA (editor de EL PAÍS).
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