El fiscal pide pena de cárcel para un ex alto cargo balear

"No soy un dios del urbanismo". Jaume Massot, ex director general y cerebro de Urbanismo del Gobierno de Baleares que presidía Jaume Matas, del PP, habló así ante la Audiencia de Palma durante el primero de los 68 juicios previstos del caso Andratx de supuesta corrupción urbanística. La Fiscalía Anticorrupción duplicó ayer su petición contra Massot, hasta cuatro años de cárcel, por supuesta prevaricación urbanística y por cooperación necesaria en un delito contra la ordenación del territorio.

Massot -que fue funcionario de Andratx- fue detenido en noviembre de 2006 siendo alto cargo de Matas, al igual que el principal imputado, el que era alcalde de Andratx por el PP, Eugenio Hidalgo, que fue encarcelado durante más de 50 días. Éste afronta por los mismos hechos, derivados de la licencia que se otorgó para la construcción de una casa ilegal en un terreno protegido, una posible pena de cinco años de prisión, uno menos de lo anunciado inicialmente.

El arrepentido del caso, Jaume Gibert, inspector celador de obras de Andratx y socio de Hidalgo en promociones inmobiliarias -y que también estuvo preso con el alcalde- se beneficia de su confesión y colaboración la Fiscalía. Ésta reclama un año de cárcel para el letrado de Andratx, Ignacio Mir.

Gibert deja de ser acusado de falsedad y de los seis años previstos pasa a una petición de cuatro meses por un delito contra la ordenación del territorio. La defensa de Gibert evidenció el pacto de confesión y, al contrario de los letrados del resto de imputados, que pidieron la absolución, aceptó la petición fiscal. El arrepentido destapó en parte ante los jueces el operativo de la trama supuestamente corrupta en el Ayuntamiento de Andratx.

Los fiscales Juan Carrau y Pedro Horrach mantienen en secreto para otras causas del caso Andratx más munición acusatoria librada ante el juez instructor por el confeso Gibert. La modificación de penas que introdujeron por el caso del chalé del alcalde, un año menos de cárcel de los seis anunciados para Hidalgo, son consecuencia indirecta del pacto de los fiscales con Gibert.

El ex edil sale beneficiado por la retirada de la acusación de falsedad documental al arrepentido que fue acusado por haber firmado que la caseta de aperos del ex edil era antigua, lo que permitía su reforma pese a la falta de condiciones urbanísticas y legales. La jornada de ayer del juicio se centró en los peritajes de arquitectos, abogados y aparejadores sobre las características técnicas de la construcción y sus licencias.