La reforma penal de tráfico amenaza con colapsar aún más los juzgados

La reforma del Código Penal en materia de seguridad vial, que castiga con penas de prisión a quienes circulen sin carné, amenaza con saturar aún más los juzgados penales. Al menos así lo considera el juez decano de Málaga, Manuel Caballero Bonald, quien aseguró que la falta de plazas para cumplir penas de servicio a la comunidad, una medida también contemplada para los grandes infractores de tráfico, ha obligado a crear una lista de espera. En algunos casos, la prescripción de la pena llega antes de que los condenados empiecen a cumplir el trabajo social que les fue impuesto. Caballero Bonald presentó ayer la Memoria de los juzgados malagueños de 2007. El juez decano calculó que de mantenerse el actual ritmo de detenciones por conducir sin carné, en Málaga se alcanzarán 160 condenas al mes, la mayoría de trabajos en beneficio de la comunidad.

En la actualidad, Málaga sólo cuenta con 185 plazas para este tipo de penas. El máximo representante de los jueces de la provincia de Málaga criticó que el Gobierno no empezara a firmar hace meses convenios con instituciones y organizaciones no gubernamentales para crear nuevas plazas de trabajo en beneficio de la comunidad.

Una de las repercusiones más claras de la reforma penal del tráfico recae sobre la ejecución de sentencias. Los diez juzgados penales de Málaga acumulan 11.007 ejecutorias, es decir, sentencias pendientes del trámite de ejecución. "En Málaga circulan unas mil personas sin carné, y en el 95% de los casos las condenas son por conformidad, casi siempre de multa o de trabajos en beneficio de la comunidad. Estas condenas habrá que ponerlas en la cola y el montón de las ejecutorias", aseguró Caballero Bonald. "Me parece estupendo que se considere delito conducir sin permiso (...) pero no me parece estupendo que ese incremento de trabajo no venga acompañado de la creación de nuevos juzgados", afirmó. El juez decano reclama la creación de 14 nuevos juzgados en Málaga: seis de primera instancia, dos mercantiles, dos de instrucción, dos penales, uno social y uno o dos de lo Contencioso-Administrativo.

Caballero Bonald habló de la situación "próxima al colapso" de los juzgados mercantiles, con más del doble de trabajo de lo recomendado por el Consejo General del Poder Judicial.