Adiós al sedentarismo

Los críos están gordos. España es el segundo país de la Unión Europea, por detrás de Malta, con mayor porcentaje de niños con sobrepeso entre los 7 y los 11 años.

El sobrepeso se ha convertido en un problema acuciante de las sociedades desarrolladas. Se cree que en pocos años tanto la población adulta como infantil experimentará un aumento del síndrome metabólico o también denominado síndrome X, que consiste en un conjunto de dolencias como la obesidad abdominal, hipertensión y aumento de lípidos o azúcar en sangre.

Ante esta problemática no se pueden hacer oídos sordos y Nintendo ha sido uno de los primeros en ponerse las pilas para que su consola Wii pueda combatir la nueva epidemia del siglo XXI. No se podrá decir que los videojuegos fomentan el sedentarismo, la revolución se llama Wii Fit y hará sudar la gota gorda a todo aquel que quiera ponerse en forma de manera divertida pero eficaz.

Todo empezó con una idea de Shigeru Miyamoto, creador de juegos como Pikmin y Nintendogs. Su afición por pesarse a diario y realizar una gráfica con los datos le llevó a desarrollar esta actividad en un juego y compartirla con la familia. Pero eso no era suficiente para llamar la atención de los compradores, así que, basándose en el creciente interés de la población por mantenerse en forma y de idear un aparato que controlara si se realizaba bien el ejercicio, nació Wii Fit.

Wii Balance Board es el nombre de este nuevo periférico que, conectado a la consola, permite realizar ejercicios para alcanzar un índice de masa corporal (IMC) adecuado. El aparato se asemeja a una báscula, pero además incorpora sensores de presión que miden la posición del jugador y, de esta manera, controlan su equilibrio. Junto al periférico se encuentra un disco con el juego Wii Fit, en el que el jugador encontrará todos los ejercicios.

Al estilo de Brain Training, el juego para Nintendo DS que ejercita el cerebro humano, lo primero que hará el programa es realizar un test físico. Medirá el índice de masa corporal en función del peso, estatura y edad. Luego deberán ejecutarse unas pruebas para medir el centro de gravedad y la habilidad atlética. Con esos dos valores se obtiene la edad Wii Fit que normalmente no se corresponde con la edad del jugador, el objetivo es que ese valor disminuya conforme pasen las semanas y aumenten los días de entrenamiento. No hay que desanimarse, lo normal es que esa edad sea elevada para poder picarse y conseguir una buena marca con el entrenamiento diario.

Con ese dato en la cabeza el programa propone rebajar el IMC en un tiempo prudencial. En ese momento el jugador ya tiene acceso a cuatro tipos diferentes de ejercicios, yoga, tonificación, aeróbic y equilibrio.

Los minutos que se pasen realizando ejercicios se irán acumulando para así desbloquear nuevos ejercicios. El yoga mejorará el equilibrio y una correcta postura con figuras como la media luna y la posición del guerrero. En la parte de tonificación lo importante es tener unos músculos fuertes. Por eso se pondrán en forma piernas y brazos con abdominales, flexiones, sentadillas y ese tipo de actividades. En aeróbic lo importante es activar la circulación sanguínea corriendo o practicando steps. Para acabar la sesión también está bien practicar el equilibrio con divertidos ejercicios.

Motivarse con Wii Fit es fácil, ya que sus ejercicios son de lo más entretenidos. Algunos expertos ya lo han recomendado y además, de una vez por todas, Nintendo está dinamitando el tópico de que los jugadores de videojuegos son personas sedentarias y poco amantes del esfuerzo físico.