_
_
_
_
_
Entrevista:DE PASEO CON... Javier Rojo | Fin de semana

Del centro de Vitoria a Armentia con una parada en El Prado

¿Dónde vive Javier Rojo? Ni él mismo lo sabe. El recién reelegido presidente del Senado (Pamplona, 1949) es un torrente de anécdotas sobre los muchos lugares que ha visitado en los últimos cuatro años en su papel de cuarta autoridad en el protocolo del Estado. Se ve a sí mismo como "un privilegiado", pero, puestos a elegir un rato de ocio, mira al territorio de su niñez, a Vitoria. Espera a EL PAÍS en la barra de Los Guaranís, una institución entre los bares y restaurantes vitorianos, sito en la calle Portal de Castilla, con un botellín de agua en las manos.

Vitoria luce una tarde de primera primavera, uno de esos días extraordinarios que se cuelan entre las habituales lluvias de abril. El político socialista, cómodo en la conversación, se considera "un urbanita", el hijo de un ferroviario que vivía en lo que casi eran las afueras de la capital alavesa y hoy es el centro, la calle Sancho el Sabio. Considera este punto o cualquier otro del corazón de la ciudad buen lugar para iniciar la marcha, el paseo hasta la basílica románica de Armentia, hasta el bosque que lo rodea, donde uno se "puede perder" sin salir apenas de la ciudad.

El presidente del Senado gusta de ir al bosque casi sin salir de la ciudad

En el camino hacia Armentia, justo enfrente de Los Guaranís, se encuentra El Prado, otro bosque en la ciudad. "Quise vivir en esta zona y tuve un piso mirado, pero..." Cruzan niños, paseante y corredores. Desde el parque, Rojo recuerda su escuela pública, hoy la sede de CCOO en al ciudad, y a su maestra, "la señorita Crescencia". Mira hacia la Capilla del Prado, donde hizo su Primera Comunión, y recuerda lo lejos que entonces estaba del centro lo que hoy es ya ese mismo centro urbano.

Ser presidente del Senado permite viajar, pero también vuelve imposible el anonimato. Rojo, quien vive entre Madrid y Vitoria lo tiene asumido y asegura que ofrece compensaciones: "Lo que aprendes, la gente que conoces". En Vitoria todo el mundo le mira; unos le quieren y otros no, pero asegura tajante que nunca dará la espalda a la ciudad. El paseo anónimo queda para los viajes de trabajo, para las otras ciudades que visita. Camino a Armentia está el complejo deportivo Estadio de la Caja Vital, que evoca con nostalgia y ahora visita poco, pero del que no sigue siendo abonado.

Se sienta en la tierra húmeda de El Prado y aguanta las fotos entre risas y rayos de sol en la cara. Mientras, la gente le mira. No puede dejar de evocar momentos de sus últimos cuatro años, del orgullo de "representar a España" en un discurso en la ONU o en los funerales por el ex presidente de EEUU Ronald Reagan, a la emoción en los aniversarios del campo de exterminio nazi de Auschwitz o de la liberación de París, o la dureza del África subsahariana.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

"Relativizas las cosas. La patrias chicas me dicen tan poco,..." asegura un Rojo feliz, contento de mirar a su niñez e incapaz de renunciar a su "territorio": "Le represento". La mirada al pasado no le impide reconocer que haber viajado le hace ver las cosas de otra manera: "Conocer mundo te vuelve más tolerante y respetuoso. Soy muy de mi tierra, pero no hago dogma de nada".

"Armentia es un desconocido para mucho vitorianos", apunta sin pensar en las campas y en el patrón de la provincia, San Prudencio. Rojo mira más al bosque: "Un monte sencillo y salvaje. cómodo, sombrío. Sólo te molestan los pájaros. Tenemos a 25 minutos a pie del centro lo que a otros les cuesta horas". Rojo recuerda que camino a Armentia se puede parar y refrescarse en el bar de El Prado o, ya en el pueblo, en álguno de sus bares o sidrerías. El presidente del Senado se despide contento. Le quedan unas horas en Vitoria y luego, rumbo de nuevo a Madrid donde le espera el arranque de la nueva legislatura.

Guía para un plan

- El aperitivo

- Saburdi: Dato, 32.

- Los Guaranís: Portal de Castilla, 42.

- Café Dublín: Plaza de la Virgen Blanca.

- Colmado Los Manueles: Sancho El Sabio, 12.

- Lugares para comer

- Arkupe: Mateo de Moraza, 13; 945 230088.

- Los Guaranís: Portal de Castilla, 42; 945 133762.

- Sidrería Armentegi: Barrio de Arriba 6, Armentia; 945 132101.

- De copas

- Plaza: Postas, 5.

- Juke Box: San Prudencio 1.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_