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Los problemas de la Justicia

Los juzgados penales acumulan 406.665 sentencias por cumplir

Las irregularidades que permitieron que el supuesto asesino de la niña Mari Luz disfrutara de libertad cuando tenía pendiente de cumplir dos años y nueve meses de prisión son moneda corriente en el sistema judicial español. La jurisdicción Penal (instrucción, juzgados penales, audiencias provinciales y Audiencia Nacional) acumulaba un total de 406.665 sentencias condenatorias firmes pendientes de ejecución en el tercer trimestre de 2007. En juzgados especialmente colapsados, como los de Málaga o Cádiz, la cifra de sentencias pendientes se incrementaría hasta en un 40% si se suman aquellos fallos sobre los que los jueces ni siquiera han abierto la ejecutoria.

Buena parte de este retraso, que apenas se ha absorbido en los últimos tres años, corresponde a sentencias firmes por delitos que acarrean prisión. "Lo que ha pasado en el Juzgado de lo Penal 1 de Sevilla con Santiago del Valle puede repetirse en cualquier momento", advierte el juez decano de Málaga, Manuel Caballero Bonald, que lleva años alertando del atasco de las ejecutorias en Málaga, donde los 10 juzgados de lo Penal tienen pendientes 11.904 sentencias. Si en la jurisdicción Penal el atasco es grande, en la Civil alcanza mayores dimensiones aún: 1.014.545 sentencias están pendientes de cumplir.

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Atasco en Madrid

Los cinco juzgados de Madrid que se encargan en exclusiva de que los reos purguen sus condenas acumulaban ayer 35.000 sentencias pendientes de ejecución. Esto no implica que todas estas sentencias estén aparcadas, en las estanterías, pero sí que, pese a ser firmes, el acusado aún no ha cumplido su pena. En esos juzgados, hay "más de 2.000 sentencias" pendientes de ejecución, según fuentes judiciales. "No damos abasto. Un juez y un secretario no pueden abordar por sí mismos la ejecución de entre 6.000 y 8.000 sentencias; es una barbaridad", explica un magistrado de Madrid. Se trata de sentencias que llevan aparejadas penas de hasta cinco años de cárcel.

Los titulares de estos órganos mantuvieron ayer una reunión urgente con el decano de Madrid, José Luis González Armengol, para exponerle "la descomunal sobrecarga de trabajo" que soportan. Y acordaron que cada juzgado disponga de al menos "dos secretarios judiciales". "¿Qué culpa tiene el juez si mientras ejecuta una sentencia, va el acusado y mata a alguien? Lo que tiene que hacer Justicia es poner medios", clama otro juez.

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