El despegue de América Latina
El subcontinente vive su lustro de mayor crecimiento económico desde los años sesenta, impulsado por la disciplina macroeconómica y el alto precio de las materias primas
Los altos precios de las materias primas y el buen manejo de las políticas macroeconómicas han llevado a América Latina a su época de mayor crecimiento desde la crisis del petróleo de los años setenta. La economía de la zona, en la que habitan 500 millones de personas, ha crecido una media del 6% entre 2003 y 2007, lo que ha permitido controlar la inflación y reducir los déficit fiscal y por cuenta corriente.
Los altos precios de las materias primas y el buen manejo de las políticas macroeconómicas han llevado a América Latina a su época de mayor crecimiento desde la crisis del petróleo de los años setenta. La economía de la zona, en la que habitan 500 millones de personas, ha crecido una media del 6% entre 2003 y 2007, lo que ha permitido controlar la inflación y reducir los déficit fiscal y por cuenta corriente.
La creación de millones de puestos de trabajo ha hecho posible un aumento del poder adquisitivo de los latinoamericanos por primera vez en décadas: el PIB per cápita ha subido un 18,5% en el último lustro, porcentaje equivalente a un 3,5% anual. La inversión extranjera ha regresado, y en grandes cantidades.
Pese a que persisten enormes desigualdades, la bonanza de los últimos años ha venido acompañada de un auge de las clases medias y de una reducción de la pobreza. Según la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), el porcentaje de latinoamericanos que vive en situación de extrema necesidad ha disminuido del 48% en 1990 al 35% actual.
Como en el resto del mundo, 2008 se presenta incierto para América Latina, aunque los expertos aseguran que es ahora mucho menos vulnerable que antes a una sacudida económica mundial, gracias precisamente a la disciplina macroeconómica de la mayoría de sus Gobiernos.
Además, el crecimiento latinoamericano ha sido inferior al de otras zonas emergentes, como Asia y el Este de Europa. Algunos economistas advierten de que el crecimiento se ha fundamentado casi exclusivamente en la exportación de materias primas. Una caída de los precios de los productos básicos podría tener efectos devastadores y devolver a las economías de la zona a tiempos pasados.
"No todo lo que brilla es oro", advierte Eduardo Lora, economista jefe en funciones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). "El crecimiento de los últimos años podría haberse basado en cuestiones circunstanciales".
Además, a diferencia de la India y China, los países latinoamericanos invierten muy poco en educación, investigación, desarrollo e innovación.
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