El salpicadero, factor de seguridad

A pesar de ser un todoterreno moderno, el nuevo Nissan X-Trail ofrece una seguridad mejorable ante los choques frontales. Tras la prueba, que se realiza a 64 km/h., el habitáculo resiste y mantiene un buen espacio de supervivencia para el conductor y el copiloto. Pero los dos ocupantes pueden dañarse las piernas con el salpicadero, y el piloto, además, sufre un fuerte latigazo cervical que afecta a la integridad del cuello. Estos factores de riesgo redujeron drásticamente la calificación hasta el 56% del máximo.

En el golpe lateral (a 50 km/h.) todo fue bien y logró el 100% de los puntos. La altura de la carrocería aleja al conductor del peligro y refuerza su protección. Y en la prueba de atropello a un peatón suspende, aunque con un 33%, una nota meritoria para un 4×4.

El X-Trail incluye seis airbags, cinturones con pretensor y limitador, anclajes Isofix para sillas infantiles, atrás, en los lados, y ESP.

La carrocería del BMW X3 soporta sin problemas la colisión frontal y parece poder digerir impactos a mayor velocidad. Son significativos detalles como la línea del techo, que mantiene su integridad, y la puerta del conductor, que no se descuadra.

Sin embargo, el cinturon del conductor aprieta más de lo deseable y el salpicadero resulta agresivo para las rodillas y los muslos de ambos ocupantes, dos detalles negativos que bajan la puntuación al 75%. En el choque lateral se ve beneficiado por la altura de su formato 4×4: recibe una nota del 94%, pues el piloto sale ileso. No logró el 100% porque una puerta trasera se abrió durante el golpe, aunque sin consecuencias para la seguridad. La dureza del frontal no ayuda a proteger a los peatones y es de los peores en este apartado: 14%.

El X3 equipa seis airbags, cinturones con pretensor y limitador de presión, anclajes Isofix en las plazas traseras laterales y ESP.

El pequeño Smart (2,7 metros de largo) logra buenos resultados y confirma que el tamaño no es lo único importante para la seguridad. Su estructura interna, que se aprecia por fuera, es casi indeformable y logra que el habitáculo apenas se altere tras el choque frontal. Los ocupantes están bien protegidos por los cinturones y airbags, aunque sus piernas contactan con el salpicadero y pueden sufrir lesiones, y este detalle reduce la nota al 81%. En el golpe lateral también resiste bien, pero como la unidad no incluía airbags laterales (opcionales), la cabeza del conductor llega a golpear contra la puerta, aunque sin consecuencias, al menos a la velocidad de la prueba (50 km/h.): 87% de calificación. Por contra, la rigidez del frontal provoca que suspenda el test de atropello: 27%.

El Smart incluye dos airbags, cinturones con pretensor y limitador y ESP. El Subaru Justy ha superado también las pruebas, con notas del 62% en la colisión frontal y del 94% en la lateral.

Aunque en una primera prueba de impacto frontal los airbags del Mazda 2 se desplegaron tarde y comprometieron la seguridad, la marca resolvió el problema -se cambió la centralita electrónica de control- y en un segundo test los resultados fueron impecables: conductor y copiloto salieron ilesos y recibió un sobresaliente (100%). El sólido esqueleto interno, el buen trabajo de los sistemas de retención y también el salpicadero, sin aristas ni partes duras que puedan dañar las piernas, definen un conjunto a la última en protección. Y el choque lateral lo confirma, porque el piloto también salió indemne, aunque el golpe provocó que se abriera una puerta trasera, rebajando la calificación al 94%. El colofón fue el test de atropello, que muestra un frontal bien diseñado para minimizar las lesiones, y logra una nota elevada del 49%.

El Mazda 2 incluye seis airbags (salvo el básico), cinturones con pretensor y limitador, fijaciones Isofix atrás y ESP opcional.

El Suzuki Splash es el único modelo de la última fase de pruebas que aprueba en protección a peatones, aunque otros modelos logran notas superiores al 40% y confirman la mejora general en este apartado. El Splash, cuyos resultados son válidos también para su clon el Opel Agila, logró un 52% de calificación, gracias a la correcta flexibilidad del morro. En el choque frontal, la estructura aguantó y los airbags y cinturones funcionaron bien, pero el salpicadero, que puede dañar las piernas, rebajó la puntuación al 81%. En el impacto lateral, la altura de los asientos reforzó la seguridad y recibió el 100% de los posibles puntos. Sus notas se corresponden a cinco estrellas, pero no las logró porque no pudo someterse al test de choque contra un poste: la unidad no montaba los airbags de cortina opcionales.

El Splash lleva cuatro airbags, cinturones con pretensor y limitador, Isofix atrás y ESP opcional.

Los fabricantes franceses parecen haberle tomado la medida a las pruebas de Euro NCAP: Renault lidera el ranking con ocho modelos cinco estrellas y Peugeot se sitúa segunda con siete coches. Citroën tampoco desentona (cinco) y el nuevo C5 lo confirma con resultados notables: 94% en el choque frontal y 100% en el lateral. Combina una carrocería grande y resistente con sistemas de retención a la última, como el airbag para las rodillas del conductor, que afina aún más la protección y marca la diferencia: todos los coches que lo incluyen logran las cinco estrellas. En cambio, la prueba de atropello revela un frontal flexible a la altura del parachoques, pero con un capó muy rígido. Calificación del 30%.

El C5 equipa siete airbags (los seis habituales más el de rodilla), cinturones con pretensor y limitador, fijaciones Isofix en las plazas traseras y ESP. El nuevo Renault Laguna logra también las cinco estrellas, con notas del 100% en el choque frontal y 94% en el lateral.

A pesar de que las marcas alemanas están por debajo de las francesas en la clasificación general de Euro NCAP -la mejor es VW, con cinco coches cinco estrellas-, la mayoría de los modelos germanos obtienen el máximo galardón. El último ejemplo es el Mercedes Clase C, que recoge soluciones avanzadas y ofrece una protección completa. Entre otras cosas, cuenta con un salpicadero poco agresivo para las piernas y añade un airbag para las rodillas del piloto. Y así solventa uno de los pocos peros en seguridad de los mejores automóviles actuales: la integridad de las piernas en los accidentes frontales. Las puntuaciones son concluyentes: 94% en el choque frontal y 100% en el lateral. En cambio, la escasa capacidad de amortiguación del frontal penaliza la protección a los peatones. Nota del 30%.

El Clase C tiene siete airbags, cinturones con pretensor y limitador, anclajes Isofix atrás y ESP.

Grande y avanzado, el Volvo V70 reúne los mejores ingredientes para ofrecer una buena protección. Mide 4,80 metros de largo y su carrocería cuenta con amplias zonas de deformación. El habitáculo es sólido, incluye airbags y cinturones eficaces, y añade soluciones como la columna de dirección colapsable, que retrae el volante hacia el salpicadero para aumentar el espacio de seguridad del conductor. Además, es de los pocos modelos que incluye un salpicadero no agresivo con las piernas. Este conjunto bien resuelto permite a los ocupantes salir ilesos de la colisión frontal. Calificación del 94%; Euro NCAP no aclara por qué no otorgó el 100%. La colisión lateral tampoco mostró riesgos -aunque el airbag se desplegó algo tarde- y obtuvo el 100%. Y en la prueba de atropello rozó el aprobado y se sitúa entre los coches menos lesivos para los peatones: nota del 44%.

El V70 viene con seis airbags, cinturones con pretensor y limitador, anclajes Isofix atrás y ESP.