Tranquilidad engañosa

A primera vista, los datos del resumen de Bolsa de esta Semana de Pasión pueden ser engañosos. El Ibex 35 apenas ha caído un 0,44%, un movimiento mucho menor del que ha tenido en las dos semanas precedentes (un -3,64% la primera de marzo y un 2,6% en la segunda), aunque suficiente para perder los 13.000 puntos que con tanto esfuerzo había conquistado la semana precedente. En cambio, el día a día demuestra que la tranquilidad no ha sido tal, y que el saldo final encubre una semana de nervios.

Al comienzo, todos los ojos se posaban en la Reserva Federal. Lo hicieron desde el principio. La intervención de la Fed en la compra de Bear Stearns, el quinto banco de inversión del mundo, por JP Morgan y la bajada al 3,25% de los tipos aplicados a los bancos comerciales la pusieron en primera línea. Pero la gran cita llegó el martes con la reunión ordinaria en la que decretó unas bajas de los tipos de interés hasta el 2,25%.

Estos movimientos demuestran que la crisis financiera que comenzó en agosto es de mayor calado del pensado inicialmente. También la importante subida del Euríbor este mes muestra que las turbulencias están todavía muy presentes en los mercados.

Un sector que ha acaparado el protagonismo estos días ha sido la banca. El colapso de Bear Stearns puso en el disparadero a toda la banca privada y, por extensión, a todo el sector, que el lunes sufrió con especial virulencia la falta de confianza de los inversores. Pero los resultados que en los días posteriores presentaron Lehman Brothers, Morgan Stanley y Goldman Sachs, mejores de lo previsto pese a la caída de beneficios, acabaron por estimular las compras en el sector.

Protagonismo de la banca

En España, la banca tuvo un comportamiento similar al del resto de mercados. A ello hay que sumar la entrada del inversor indio Ramchand Bahvnani en el Banco Popular y el Banco Sabadell, que ha añadido un aliciente más, sobre todo en las entidades medianas. De hecho, los bancos del índice selectivo están entre los valores que más han subido esta semana. Sólo Iberia, en la que British Airways ha aumentado su posición y se ha acercado al accionista mayoritario (Caja Madrid), los ha superado.

Por lo que respecta al mercado del crudo, los inversores parecen tomar conciencia de que la crisis financiera tendrá impacto sobre la economía real, y eso acabará por afectar al consumo. Así, tras el máximo alcanzado el pasado lunes, cuando el barril de brent se pagó por encima de los 108 dólares, el jueves su cotización cayó hasta los 99.

También la debilidad del billete verde ha llevado a los inversores a desconfiar del crudo como un valor seguro, pues cotiza en dólares. Algo que también ha podido comprobarse con el oro, que en cuatro días pasó de pagarse a más de mil dólares la onza a 920. Y es que la moneda estadounidense, pese a que se ha recuperado algo a lo largo de la semana, ha llegado a pagarse a 1,57 dólares por euro.