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Torroella cierra un zoológico por abandono de los animales

El propietario dispone de 15 días para retirar las bestias

El Ayuntamiento de Torroella de Montgrí (Baix Empordà) clausuró ayer al mediodía las instalaciones del parque animal de Sobrestany, un núcleo zoológico que alberga más de 300 animales. El Consistorio tomó esta decisión después de que el Departamento de Medio Ambiente retirara al parque la declaración de núcleo zoológico por la "desatención" de los animales y el "mal estado" del recinto en el que habitan.

Medio Ambiente, que también sancionó con 2.000 euros a la empresa que explota el parque, ya abrió una investigación el verano pasado después de recibir varias denuncias. En ellas, algunos visitantes alertaban de que no se cambiaba el agua de los animales, que las jaulas estaban sucias y que había ejemplares desnutridos.

El parque animal de Sobrestany tiene 40 hectáreas y está situado en las inmediaciones del macizo del Montgrí. Actualmente alberga a unos 300 animales, entre ciervos, llamas, visones, tortugas y aves rapaces. La mayoría de especies son salvajes, pero también hay una nutrida colección de ejemplares domésticos como vacas, caballos, asnos y gallinas. El centro ha funcionado durante 12 años como una especie de parque-safari donde los visitantes, principalmente familias con niños pequeños, podían entrar con su vehículo, recorrer las instalaciones y dar de comer a los animales.

La clausura del parque fue oficiada por cuatro agentes de la Policía Municipal y dos miembros del cuerpo de agentes rurales, que precintaron tres de las cinco puertas de acceso al recinto, para que los trabajadores puedan seguir alimentando a los animales. El propietario, Alfons de Robert, dispone ahora de 15 e días para retirar los animales y de un mes para interponer un recurso de reposición al Ayuntamiento de Torroella de Montgrí. De Robert ha negado en todo momento las acusaciones de abandono y desatención del parque, y atribuye las muertes de los animales denunciadas por Medio Ambiente a "ataques de perros".

El propietario no estaba ayer durante el cierre de las instalaciones pero su esposa lamentó que éste se produzca en "plena Semana Santa" y que deje "tiradas" a muchas familias que habían planificado visitarlo durante sus vacaciones. Varias parejas con niños intentaron ayer acceder sin éxito al parque y expresaron su malestar por el final del zoológico.

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