El Cebit, contra el derroche energético

La escalada de los precios del petróleo y la mayor concienciación medioambiental hacen que sea insostenible el actual derroche de energía de los ordenadores. La industria informática ha tomado buena nota de ello y en la feria Cebit, que se celebró durante toda la semana pasada en la ciudad alemana de Hannover, se mostraron múltiples tecnologías e iniciativas para reducir el consumo energético de los ordenadores a la mitad. De esta forma, se podrá seguir aumentando la capacidad de proceso global de las tecnologías de la información y aminorar al mismo tiempo su contribución dañina al medio ambiente.

Los ordenadores y otros aparatos de tecnologías de la información son responsables de aproximadamente el 2% de las emisiones globales de dióxido de carbono, según la consultora Gartner.

Más gasto en energía

El año pasado, según IDC, muchos centros de proceso de datos se gastaron más dinero en la factura eléctrica para alimentar y refrigerar sus equipos que en la compra de nuevos equipos. En los próximos cinco años, el consumo de energía será la principal partida presupuestaria de los centros de datos de las empresas.

Los consumidores están dispuestos a invertir un poco más de dinero en la compra de equipos más eficientes energéticamente, porque en menos de dos años se recupera el gasto inicial y además se contribuye a preservar el medio ambiente.

En la feria Cebit se puso de manifiesto lo mucho que se puede hacer con relativo poco esfuerzo para gastar menos energía y al tiempo tener mayor capacidad de proceso. El tema se plantea en tres niveles: ordenadores más eficientes energéticamente, programas y tecnologías para utilizarlos con mayor provecho y, por último, sistemas de embalaje y aprovisionamiento de los fabricantes más racionales. Había múltiples iniciativas en Cebit de los dos primeros apartados mientras que el tercero afecta a los suministradores y quedaba fuera de la feria.

La forma más sencilla y eficaz de que un ordenador gaste menos energía empieza por su fuente de alimentación. Habitualmente, la eficiencia de las fuentes de los PC, que convierte la corriente alterna en continua, es del 50%. Es decir, que la mitad de la energía se pierde de entrada al pasar a calor, que encima se tiene que evacuar y gastar más energía en ventiladores que hacen ruido.

La racionalidad se ha impuesto después de 25 años de existencia del ordenador y en Cebit se veían muchos fabricantes que mostraban fuentes con el certificado 80+, que significa que garantizan una eficiencia de al menos el 80% con el ordenador trabajando al 20%, 50% u 80% de su capacidad. En Europa, como la tensión es de 220 voltios en vez de los 125 voltios de EE UU, la eficiencia, con la misma fuente, es del 83% como mínimo. El factor de potencia es de al menos 0,9.

La potencia típica de un ordenador de sobremesa es de al menos 150 vatios y los hay de incluso 1.500 vatios. Con una fuente más eficiente se puede ahorrar al menos cada día un kilovatio-hora, que son 10 céntimos de euro, según las horas del día que esté encendido el ordenador y el tipo. Las fuentes de los portátiles suelen ser de 65 vatios y más eficientes. También se pueden mejorar y la prueba es que se calientan, señal inequívoca de pérdidas.

Ventiladores silenciosos

Aparte de las fuentes, los grandes fabricantes de componentes de ordenador, como Asus, MSI y Gigabyte, enseñaban placas que consumen hasta el 60% menos de energía y tarjetas gráficas de alto rendimiento también de menor consumo. En cuanto a los ventiladores, continúa la tendencia a hacerlos más silenciosos.

Del lado de los chipset, los componentes que gestionan todos los datos del ordenador, tanto Intel como AMD mostraron sistemas mucho más eficientes y a la vez más potentes. La utilización de reglas de diseño de 45 nanómetros en la fabricación de los procesadores, anunciados también por ambas compañías, hace que su consumo y su rendimiento por vatio sea mayor.