Los Mossos no podrán usar el 'kubotán' ni las pistolas Taser

Los mossos que dispongan de un kubotán deberán deshacerse de él. A lo sumo, podrán usarlo como llavero, conservarlo como objeto de fantasía o regalarlo. Pero ya no volverán a utilizar este pequeño punzón de PVC en su trabajo diario. El Departamento de Interior ha decidido prohibir el kubotán y dejarlo fuera del reglamento. Idéntico destino aguarda a las pistolas eléctricas Táser, que también han sido objeto de una fuerte polémica.

Interior ha aprobado dos instrucciones que, por primera vez, regulan hasta el último detalle qué armas de fuego y qué herramientas pueden emplear los policías. El kubotán nunca estuvo regulado, aunque algunos mossos lo llevaban consigo como herramienta defensiva, ya que permite inmovilizar a un sujeto violento presionando sobre un punto de su cuerpo. La polémica vio la luz el pasado mes de mayo cuando, en una manifestación de okupas en Barcelona, agentes antidisturbios lo usaron contra jóvenes que habían provocado altercados.

¿Arma o herramienta?

Los juristas defendieron entonces que el kubotán es un arma y que, al no estar reglada ni formar parte de la dotación policial, está prohibida. Una interpretación que chocó con la de los responsables policiales, que hablaron sólo de herramienta y consideraron que, en ausencia de un veto explícito, el uso del pequeño cilindro con punta redondeada era perfectamente legal. Las normativas recién aprobadas disipan toda duda: "El kubotán no está en la lista reglamentaria y por tanto no se podrá usar", explicó ayer Xavier López, uno de los artífices de los textos.

Las instrucciones ponen el acento en el uso "oportuno y proporcional" de las armas de fuego, y recuerdan que desenfundar la pistola y disparar se considera "una medida extrema". Así, se detalla que la equipación básica consiste en la pistola, la defensa (o porra) y las esposas.

En cuanto a las herramientas, especifica que sólo se pueden utilizar "las que han sido suministradas por la Dirección General de Policía como dotación oficial". Dentro del reglamento quedan, por ejemplo, las defensas extensibles, las eléctricas y los aerosoles, aunque sólo para las unidades especializadas. Las famosas pistolas Taser, que producen una descarga de 50.000 voltios sobre el cuerpo y que han provocado ya varias muertes, han sido excluidas por su peligrosidad.