_
_
_
_
ELECCIONES 2008 | Las consecuencias del 9-M

El PSE ve que la alternativa está más cerca

Las provincias vascas son las circunscripciones donde más crecen los socialistas

El socialismo vasco quiso mostrar ayer un perfil bajo en el día siguiente a su rotundo éxito en las urnas. El partido pospuso la celebración del mejor resultado porcentual que ha conseguido en Euskadi en su historia y dio todo el protagonismo a la manifestación de condena por el asesinato por ETA de su ex edil de Mondragón Isaías Carrasco. Patxi López, secretario general de la formación, acudió por la mañana a la concentración silenciosa frente al Ayuntamiento de Bilbao, donde no habló. Sólo quiso que se escuchase su voz en Mondragón, al final de la marcha.

Los socialistas se enfrentan al reto de guardar distancias con el PNV
El PSE confía en que Zapatero valore la aportación vasca a su triunfo
Más información
"El descenso del PNV obedece a su falta de lectura del país"

Con todo, los socialistas, que reunieron también en esa localidad guipuzcoana a su ejecutiva para comenzar el análisis de los resultados, no podían ocultar su satisfacción. Cada vez más se sienten una alternativa real de Gobierno y consideran que la caída del PNV abre una puerta que hasta ahora siempre había estado cerrada. "No nos lo terminamos de creer. Sabíamos que iba a pasar, pero no tan pronto. Estamos ante el final del nacionalismo", aseguraba en la misma noche electoral un cualificado dirigente del PSE.

El propio López recalcó el domingo en su primera comparecencia su voluntad de ser alternativa. Ayer en Mondragón, dirigentes y militantes mostraban antes de la manifestación su alegría y aseguraban que la vuelta del PNV se antoja difícil. Triunfar en Vizcaya por primera vez les lleva a pensar que el cambio de ciclo es definitivo. Guipúzcoa, Vizcaya y Álava, por ese orden, son las circunscripciones de toda España donde los socialistas más aumentaron su porcentaje de votos el domingo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

El PSE tiene en el presidente Zapatero a su principal valedor. Muchos creen que su intento de terminar con el terrorismo ha tenido una repercusión directa en el apoyo en las urnas. En cualquier caso, aseguran que la posibilidad de ser alternativa está avalada por la trayectoria de los últimos comicios, en que el PSE ha visto crecer sus apoyos mientras descendían los del PNV.

El secretario general del PSE de Álava, Juan Carlos Prieto, fue de los pocos que hizo ayer declaraciones públicas. Relacionó el "coraje" y el compromiso de su partido con la libertad en Euskadi y aseguró que se habían visto "muy recompensados" en las elecciones. Prieto hizo estas afirmaciones tras la concentración celebrada en Vitoria en repulsa por el asesinato de Carrasco.

Los socialistas se encuentran ahora ante el desafío de guardar las distancias con el PNV, que la misma noche electoral tendió la mano a Zapatero para negociar la solución del "problema político" vasco. El riesgo de que los peneuvistas sean necesarios para la gobernabilidad puede ofrecer una imagen distorsionada de la realidad y dar al PNV un peso que al PSE, como segunda fuerza vasca, no le interesa.

Los socialistas se pueden enfrentar de nuevo a un reproche similar al que recibieron por haber dejado que el PNV se hiciese con las diputaciones de Álava y Guipúzcoa pese a no haber ganado las elecciones forales de mayo. Más de un dirigente se preguntó entonces si no era el momento de desalojar al nacionalismo de la Diputación alavesa. La respuesta fue cauta. "Cada cosa a su tiempo". Los socialistas vascos quieren asimilar ahora su éxito, convencer a la ciudadanía de que van a ser un referente e ir dando pasos poco a poco. Saben que existe un riesgo de que Zapatero necesite a los votos del PNV para su investidura. No quieren pensarlo en exceso, pero cuentan con que la ejecutiva federal valore que los resultados de Euskadi han contribuido en buena medida al triunfo de Zaapatero.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_