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Entrevista:DIEGO VALDERAS | Candidato de Izquierda Unida a la presidencia de la Junta | ELECCIONES 2008 | Campaña electoral

"Los indicadores andaluces ruborizan"

Es más duro que nunca con el PSOE y su candidato, Manuel Chaves. Dice que está incrustado en el poder, hace políticas de derechas y gestiona mal. Sin embargo, Diego Valderas (Huelva, 1953) aspira a determinar el gobierno de a quien combate si éste se queda a las puertas de la mayoría absoluta: "En el diálogo nos veremos". No cree crucial quedarse otra vez fuera del Parlamento, se considera prescindible. Choca que hable de sí mismo en tercera persona.

Pregunta. IU ha ido bajando desde 1996. ¿Por qué? ¿Por qué ha cambiado IU o por qué ha cambiado la sociedad?

Respuesta. No tuvimos aciertos en 1994, con la legislatura de la pinza...

P. No me refiero concretamente a la pinza, sino a la caída continuada desde entonces.

"Si no logro sacar el escaño a IU no le va a pasar nada, me va a pasar a mí" "No hablo de pactos. Le digo a Chaves que en el diálogo nos veremos"

R. Es que no se puede obviar la pinza, quedó en la conciencia de los ciudadanos aunque no fuera la realidad. Hemos necesitado los últimos ocho años que Diego Valderas lleva de coordinador para quitar esa idea. Hay dos momentos: el primero, con Luis Carlos Rejón al frente, IU baja en 1996 de 20 diputados a 13, y en 2000 se baja a seis. Es en 2004, al llegar Diego Valderas, cuando se aguanta la bajada, y es ahora, con Diego Valderas, cuando, según los sondeos, consolidamos al alza. Estamos en la recuperación como producto de una trayectoria política.

P. La pregunta era si IU ha bajado por su culpa (la de la organización), o porque Andalucía ha cambiado.

R. Es verdad que la sociedad europea ha cambiado bastante.

P. Se ha mostrado favorable a llegar a un pacto con Chaves.

R. Yo no he hablado de pacto, sino de que IU ha hecho un buen trabajo de la mano de la dirección que yo presido y del grupo parlamentario. Somos una fuerza política de gobierno: gestionamos municipios con una población total de dos millones de personas. Por ejemplo, Sevilla y Córdoba. Yo no voy a las elecciones a decir que voy a optar a la oposición, no, yo soy una fuerza política para optar a la mayoría. Cuando llegamos a este punto, uno tiene que tener los pies en el suelo, y eso ¿qué me dice? Que puedo ser determinante y decisivo, y si el tren se para en mi andén, lo que le digo a los ciudadanos es que la política de derechas conmigo no va a pasar. Participe Chaves, Zarrías, o quien sea. Y ¿qué es lo que ocurre? Que ellos practican muchas políticas de derechas. Bueno, pues en el diálogo nos veremos, y con el programa y los contenidos, decidiremos. Y, además, no habrá ningún paso si no es con la aprobación en referéndum de las bases de IU.

P. Ha estado llamando en esta legislatura a reuniones al máximo nivel con Chaves. Sin embargo, ahora dice que está "viejo y caduco".

R. (Risas) A veces uno hace correr mucho a los adjetivos. Hemos hecho el trabajo que teníamos que hacer y yo no he buscado nada especial. Ahora, respecto a lo segundo, lo que he dicho es lo que dice la gente, y lo que el PSOE le decía a la gente de mi pueblo [Bollullos del Condado], como que ya estaba bien de mayoría absoluta de IU durante 20 años. Lo han dicho los consejeros y Chaves. Que no se asuste nadie. Cuando uno lo dice en la batalla política, paga con la misma moneda. Hay 18 años de Manuel Chaves, que yo he llamado manolismo, que son de continuismo, de más de lo mismo. Hay poca frescura en el PSOE. Son 26 años de mayoría absoluta del PSOE con unos indicadores comparativos frente a España y Europa que ruborizan al más pintado. Y la pregunta es: ¿usted a qué ha estado aquí? ¿sólo para los triunfos y no para los desaciertos? Usted es responsable también de los desaciertos. Si no, algo falla, ¿o es que estamos en un circo electoral y no democrático?

P. No se ha visto junto a usted a Concha Caballero o Felipe Alcaraz. ¿Se siente solo?

R. Yo no. Voy a poner dos ejemplos de que no estoy solo. Uno, Concha Caballero estuvo abriendo campaña en Almería y fue de las primeras que se ofreció a ayudar. Con más calor o menos, está en la campaña. Felipe Alcaraz tiene su campaña, tiene un acto cada día. No hay necesidad de que coincidamos.

P. ¿El conflicto que precedió a las elecciones sobre si usted iba en Sevilla o en Huelva ha perjudicado la campaña?

R. No creo. Hay cosas que le cogen muy lejos a los ciudadanos. A lo mejor en los ámbitos cercanos tiene su influencia, pero en círculos amplios esa situación de IU no ha llegado. La unión final es lo que ha ganado. Aunque siempre hay cosas que se pueden hacer mejor.

P. ¿Si no consigue el escaño por Huelva pasa algo?

R. No, a IU no le va a pasar nada, me va a pasar a mí.

P. ¿Qué le va a pasar?

R. Tampoco nada. A esto hay que ir con deportividad, con responsabilidad, con autoestima, con orgullo. Y yo, la verdad, voy con esos cuatro elementos, y voy seguro y convencido de que tenemos un buen discurso, una buena propuesta política. También de que hay muchas dificultades, de que todo no juega a nuestro favor. No tengo ningún tipo de problema, lo que quiero es que haya un grupo parlamentario como el que ha estado en los últimos cuatro años, y mi objetivo es que se amplíe por Huelva y yo esté. Y si no estuviera, si hay que prescindir de Diego Valderas, pues se prescindirá de Diego, y Diego actuará de colaborador, como ha hecho siempre.

P. Da la impresión de que se está despidiendo antes de tiempo.

R. Es su impresión, no la mía.

P. IU es más izquierda, dicen, ¿la izquierda comunista?

R. No, es izquierda alternativa y plural, si nos quedáramos sólo en lo comunista, yo estaría contradiciéndome con lo que digo respecto a los careos estos de Chaves y Arenas de fraude a la democracia. Yo cometería un fraude si digo que IU es exclusivamente de pensamiento único porque no es verdad.

P. En su declaración pública de actividades, bienes e intereses dice tener 64.949 euros en su cuenta bancaria. ¿Por qué no los ha invertido para obtener más rentabilidad?

R. Ese dinero son bienes gananciales de mi mujer y míos, no me parece correcto hacer ninguna inversión sin que participe mi mujer, que es la que, además, aporta más. Nunca he sido muy amigo de inversiones en bienes muebles o seguros de vida, no le he prestado nunca mucha atención. Tengo ese dinero ahí por si me hace falta y por si le hace falta a mis hijos. No hay nada más.

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