Ibarretxe entra en campaña con el discurso de una Euskadi maltratada

El lehendakari Juan José Ibarretxe irrumpió ayer de lleno en la campaña electoral con un discurso victimista, en el que recurrió a los episodios de la violencia de género para explicar cómo no ha de ser la relación entre Euskadi y España. Ibarretxe afirmó en el acto central del PNV en Vitoria que no está dispuesto a que el vasco sea un "pueblo maltratado", porque, aunque sea pequeño, tiene derecho a decidir qué relación quiere tener con España.

Retomando su debate con Zapatero en el Congreso sobre su plan, el lehendakari argumentó que "hay que poder decidir vivir juntos" (Euskadi y España), para que no suceda como en ese mundo "horroroso" de la violencia machista, en el que hay mujeres que tienen que "decidir" lo que determina el hombre, porque si no las maltrata.

Ibarretxe compartió escenario con los presidentes del PNV, Íñigo Urkullu, y de la ejecutiva de Álava, Iñaki Gerenabarrena, y los candidatos alaveses al Congreso y al Senado, María Jesús Agirre y Emilio Olabarria, respectivamente. En su opinión es fundamental tener una presencia fuerte en el Congreso de los Diputados y en el Senado para condicionar una eventual mayoría del PSOE. En ese momento precisó que el PNV está dispuesto a convivir con España desde el respeto, pero sin perder ni la identidad ni el derecho de decidir "nuestro propio futuro". Una buena disposición que contrapuso a la que "una y otra vez" se traslada desde Madrid y que se basa en "disolver la identidad vasca, como si fuera un azucarillo en el café con leche, en la identidad española".

No obstante, advirtió de que este año el pueblo vasco está ante la posibilidad de abrir la puerta al derecho a decidir. Se refería a la consulta que ha anunciado que convocará el 25 de octubre, precisamente el día que se celebra el aniversario del Estatuto. El presidente del PNV, Íñigo Urkullu, profundizó en la misma idea de la consulta. "Si el PSOE acepta que este año se puede construir el futuro en común", tendrá como aliado al PNV, dijo. Por otro lado, criticó a ETA por "tener como rehén a la base social de la izquierda abertzale" y afirmó que la abstención que propone no sirve para construir nada.