San Sebastián se plantea crear un carril exclusivo para autobuses o el tranvía
Analizará la implantación de uno u otro sistema en el eje Loiola-Centro
Al tranvía le cuesta abrirse paso en San Sebastián. Su implantación abrió un debate a finales de los 90 que aún sigue irresuelto. El Gobierno vasco quiere ponerlo en funcionamiento, como ocurre en Bilbao y, pronto, en Vitoria, pero el Ayuntamiento donostiarra, sin estar frontalmente en contra, es reacio y no se atreve a dar el paso. Ambas instituciones acercaron ayer posturas en la reunión de la Comisión Interinstitucional del Tranvía, celebrada en la sede del Ejecutivo y con la presencia también de la Diputación guipuzcoana.
El acuerdo alcanzado consiste en ampliar el estudio realizado hasta ahora sobre la implantación del tranvía en San Sebastián. En los próximos meses se va a analizar "en detalle" cuál de los dos sistemas de transporte urbano, el autobús o el tranvía, es el más adecuado para la capital guipuzcoana.
La consejera de Transportes, Nuria López de Guereñu; la diputada de Ordenación Territorial, Arantza Tapia, y el concejal de Movilidad, Ernesto Gasco, ratificaron las conclusiones recogidas en el informe inicial, en el que se considera "imprescindible" reservar un carril de uso exclusivo para el transporte público colectivo. Lo que tienen que dilucidar ahora los técnicos es si por esa "plataforma reservada" deben circular los autobuses o el tranvía.
El nuevo estudio, que estará supervisado por un equipo técnico de la consejería y el consistorio, se va a centrar en el eje Loiola-Amara-Centro, al que se le podría añadir un ramal hacia Gros y extenderlo a otras zonas en fases posteriores. Se ha elegido el corredor Loiola-Centro porque es el que mejor se adapta al nuevo sistema de plataforma reservada, dada la demanda potencial de viajeros y las conexiones con las estaciones de ferrocarril de EuskoTren y Renfe y los intercambiadores.
El acuerdo incluye examinar un periodo de 25 años con el fin de comprobar si la rentabilidad económica y social se ajusta a la previsible demanda y los plazos de amortización de las infraestructuras viarias. Se compararán el autobús y el tranvía en parámetros como las paradas y el trazado, la velocidad comercial, los tiempos de viaje, puntos de intercambio, captación de demanda, costes y sostenibilidad.
El edil Ernesto Gasco afirmó al término de la reunión que el acuerdo logrado supone "una apuesta por la modernización" del transporte público, y confirma las tesis que ha defendido el consistorio donostiarra: "Antes de tomar una decisión en uno u otro sentido, hay que reflexionar en profundidad".
San Sebastián, que cuenta con un buen servicio de autobuses urbanos (27,3 millones de viajeros en 2007), no acaba de apostar decididamente por el tranvía, como han hecho las dos restantes capitales. En 2000 se barajó construir un mini-metro, con un coste de 467 millones de euros. Esa opción sólo la defendió el PP. El Gobierno planteó en 2003 un tranvía de 15 kilómetros con una inversión de 90 millones. El alcalde, Odón Elorza, siempre ha apostado por mejorar la red de EuskoTren con el desdoblamiento de sus vías y la construcción de estaciones en los barrios de Intxaurrondo y Altza, así como la mejora del servicio de cercanías de Renfe.
Informe previo
- UN ESTUDIO DEL GOBIERNO, LA DIPUTACIÓN Y EL AYUNTAMIENTO, CONCLUIDO EN SEPTIEMBRE PASADO, DESACONSEJA LA IMPLANTACIÓN DEL TRANVÍA EN SAN SEBASTIÁN.
- LÍNEAS. EJE NORTE-SUR: HERNANI-MARTUTENE-LOIOLA-AMARA-CENTRO. EJE ESTE-OESTE: ANTIGUO-LA CONCHA-GROS-HERRERA.
- VIAJEROS. UNOS 22.000 AL DÍA.
- COSTE. CERCA DE 15 MILLONES DE EUROS POR KILÓMETRO. UNOS 287 MILLONES EN TOTAL.
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