"Me ofrecí a ir al Congreso porque yo pongo a España por encima de todo"

Siempre omnipresente en los medios, Esperanza Aguirre (Madrid, 1952) ha bajado el ritmo de exposición desde la tarde del 15 de enero, cuando Mariano Rajoy, en una tumultuosa reunión en la sede del PP, decidió excluir a Alberto Ruiz-Gallardón de las listas al Congreso después de que ella se ofreciera a dimitir como presidenta de Madrid para ir a las Cortes.

Ésta es su primera entrevista en un medio escrito desde entonces. La hace acompañada casi todo el tiempo, en un luminoso despacho de la Asamblea de Madrid, por su mano derecha, el que habría sido presidente si Rajoy hubiera aceptado que Aguirre dimitiera, su vicepresidente Ignacio González.

Pregunta. ¿Usted también tiene el pálpito, como Rajoy, de que van a ganar?

Respuesta. Estamos llevando la iniciativa. Las encuestas dan un empate técnico, que es muchísimo más de lo que nos daban antes de las municipales, y las ganamos con el mayor porcentaje y número de votos de toda la historia del PP. Mi porra es 142 [diputados] PSOE, 167 PP.

P. ¿Rajoy es un líder ganador? Algunos dicen que da pocos titulares

R. A Rajoy le ha ido bien con su política de no dar demasiados titulares. Cuatro veces ministro, vicepresidente de la Xunta y del Gobierno... A lo mejor eso no es imprescindible.

P. ¿Está de acuerdo con la idea de que es peor candidato que gobernante?

R. De Álvarez del Manzano se decía lo mismo. Cuando ganó, todos cambiaron de opinión.

P. Ha incorporado a Aznar, Rato y Cascos a la campaña de Madrid. ¿Qué mensaje quiere lanzar?

R. Que absolutamente todo el partido está volcado para que gane Rajoy. Creo que es la campaña más importante de los últimos 30 años.

P. Pero no hacen mítines con Rajoy, sino con usted.

R. Los dan en Madrid, donde es candidato Rajoy.

P. ¿Habla mucho con Aznar?

R. Ni ahora ni cuando era ministra. No es muy dado a grandes charlas.

P. ¿Qué influencia real tiene Aznar en el partido?

R. En este momento muy poca. Yo diría que casi nula. Entre el tiempo que le dedica a FAES y el que está fuera de España... No sé si Aznar habla mucho con Rajoy, pero la impresión que da es que las decisiones las toma Rajoy asistido cuando quiere por ese órgano aestatutario llamado maitines.

P. ¿Ser presidenta de Madrid colma sus expectativas?

R. Totalmente. Ya lo hizo la primera vez, pero ahora que he sido reelegida por la inmensa mayoría, mucho más.

P. ¿Entonces por qué se mostró dispuesta a dimitir para ir al Congreso?

R. Me mostré dispuesta a ayudar a Rajoy a ganar. Lo más trascendente de los últimos 30 años es que no continúe la visión de España de Zapatero. Yo creía que todos debíamos ayudar desde el sitio donde estábamos, pero si se hubiera impuesto la idea de que para ayudar a Mariano era imprescindible figurar en su lista, yo me ofrecía con el enorme sacrificio que para mí representaba. Ni he echado órdagos, ni he hecho amenazas, todo lo contrario.

P. Pero entonces Madrid no colmaba sus expectativas.

R. Yo en política no me muevo por cuestiones personales, sino por valores. Y en este momento, España necesita que Rajoy sea presidente.

P. ¿Los madrileños entenderán que ponga esas listas por encima del cargo de presidenta?

R. Yo lo que pongo es España por encima de todo. Y por eso me ofrecí a ir en la lista. Los madrileños entienden que España está por encima de todo.

P. ¿Y en su propio partido? Fraga la ha criticado.

R. Yo creo que todo el mundo ha entendido que para ayudar a Mariano no es necesario ir en las listas. Rita Barberá es un ejemplo. Pero a lo largo de las Navidades parecía imponerse otro criterio.

P. ¿Cree que Rajoy cambió de opinión cuando usted se ofreció a hacer ese "sacrificio" que dice o ya había decidido no incluir a Gallardón?

R. Pregúntenle a él. Yo creo que cuando tuvo cerrado el fichaje de Manuel Pizarro vio, todavía más claro que antes, que el alcalde y otros debían seguir en sus instituciones.

P. ¿Y cómo explica que haya 12 alcaldes en las listas, entre ellos Teófila Martínez, de Cádiz?

R. Ella ha sido mucho tiempo diputada y alcaldesa. Yo creo que los estatutos dicen que los alcaldes no pueden ir al Congreso, salvo excepciones. Se hizo para evitar que se acumularan cargos. No podemos convertir a la excepción en regla.

P. ¿No tiene ni siquiera la sensación de haber ganado la partida a Gallardón?

R. No he jugado ninguna partida.

P. ¿Se ve como la del gesto agrio y estricta conducta?

R. No, en absoluto.

P. ¿Cómo definiría lo que se vivió en la reunión en Génova el 15 de enero entre Rajoy, Acebes, Gallardón y usted?

R. Para mí fue un día como muchos otros. En realidad, bastante menos tenso o emocionante que muchos otros.

P. ¿No fue una guerra de sucesión?

R. Nada más lejos de la realidad. Es la prensa la que habla de eso. Como lo de Gallardón, que lo daban por hecho y Rajoy no había dicho nada a favor, al contrario.

P. ¿Cree que se puede ser líder de la oposición sin estar en el Congreso?

R. Tenemos el ejemplo de Madrid. Tomás Gómez no está en la Asamblea. Y antes, en AP, Hernández Mancha. Desde luego se puede, ha pasado, pero no es lo deseable. Yo, que he estado cuatro años en una cámara nacional, he llegado a la conclusión de que la política española no está basada, como en Inglaterra, en la columna parlamentaria. Aquí hay un aspecto mediático que tiene muchísima más relevancia. En el Reino Unido cuando pasa algo, lo que sea, lo primero que se hace es reunir el Parlamento. Aquí se tarda un mes.

P. ¿Se puede ser líder de la oposición siendo senador?

R. El Senado ha ganado más peso desde que Zapatero decidió acudir al control allí una vez al mes.

P. ¿Piensa ir a declarar en el juicio de injurias de Losantos a Gallardón?

R. A mí no me ha llamado nadie. Si me llama un juez, tendré que ir. Pero no tiene por qué llamarme. Una cosa es lo que pida un abogado y otra lo que decida el juez.

P. ¿Se imagina un congreso extraordinario del PP tras las elecciones?

R. Yo estoy viendo uno del PSOE cuando pierda. Lo más probable es que Rajoy siga, pase lo que pase. Pero si Zapatero pierde, la debacle en el PSOE va a ser de órdago. Hay muchos que se la tienen jurada.

Pregunta. ¿Zapatero es culpable de los intentos de agresión de los últimos días?

Respuesta. Es el líder más extremista de Europa. Dice que somos la extrema derecha. ¿Se habrá mirado? Rajoy está con Sarkozy y Merkel, él no tiene interlocución con nadie. Eso sí, cuenta con actores que nos llaman turba mentirosa, humillante, imbécil. En lugar de considerarnos adversarios leales, nos pretenden arrinconar en la derecha extrema.

P. ¿Cree que la lucha antiterrorista será eje de la campaña?

R. El presidente que confiesa haber mentido cuando dijo que no había contactos con ETA tras la T-4, en el mundo anglosajón habría tenido que dimitir.

P. ¿Cree que Pizarro perdió el debate con Solbes?

R. Pizarro representó la ilusión y la frescura, Solbes dio una imagen rutinaria y gris. Esta noche veremos otro debate, el de Rajoy con Zapatero y ya le digo que los electores, sobre todo los indecisos, van a poder comprobar la diferencia que hay entre un líder sólido y preparado como Rajoy, frente a Zapatero, que es un producto del márketing.