Acuerdo para soterrar el tren en Vitoria con un coste de 476 millones
El proyecto excluye el empleo de tuneladoras y supondrá cinco años de obras
El soterramiento del trazado del ferrocarril en Vitoria ya está definido. En una reunión en el Ministerio de Fomento se acordó ayer que la obra se realizará mediante el método constructivo mixto de pantallas y minas, con un coste de 476 millones de euros y una duración de entre cuatro y cinco años. Quedó pendiente la financiación, que obligará a tomar una posición tanto al Gobierno vasco como a la Diputación de Álava. El alcalde, el socialista Patxi Lazcoz, confía en que antes del verano se firme el acuerdo interinstitucional que defina este capítulo. "Hay buena sintonía", afirmó.
En la reunión, se analizaron las cinco opciones que estaban sobre la mesa hasta concluir que la más idónea es el llamado método constructivo mixto, ya que supone un menor coste y un periodo de tiempo de ejecución similar al resto de métodos. Ambas técnicas se combinarán para reducir las molestias a los vecinos.
Las obras en pantalla, es decir realizadas a cielo abierto, se desarrollarán en aquellos tramos que no afecten a zonas habitadas. Y el soterramiento en núcleo urbano se llevará a cabo con rozadoras, una maquinaria empleada en lo que se conoce como trabajo de mina. El empleo de una tuneladora, más eficaz, se ha descartado, ya que suponía un incremento presupuestario de entre 80 y 150 millones de euros, mientras que apenas permite reducir el tiempo de obra.
El trazado discurrirá a lo largo de 6,8 kilómetros entre Salburua y Júndiz. También se definió ayer cómo será el recorrido soterrado. Los trenes de viajeros y los de mercancías transitarán por dos vías dobles independientes, soterradas, para así cumplir los protocolos de seguridad.
La terminal ferroviaria, parte del proyecto de estación intermodal planeado en el parque de Arriaga (a la salida de Vitoria en dirección hacia Bilbao), contará con seis vías pasantes, sitas a 17 metros de profundidad.
Si se mantienen los pasos previstos, el proceso culminará hacia el año 2011, después de presentarse el proyecto de obra y que concluyan los trámites administrativos. Desde ese momento, la obra duraría cuatro o cinco años.
"No hay argumentos para retrasar el convenio"
La inminencia de las elecciones y la incertidumbre sobre el futuro gobierno de España, llevó ayer al Ministerio de Fomento a una significativa representación del Ayuntamiento de Vitoria. Aunque era un encuentro técnico, el director de la empresa municipal Ensanche XXI, Alfredo Piris, estuvo acompañado por el alcalde, Patxi Lazcoz, y los portavoces del PNV, Mikel Martínez, y del PP, Alfonso Alonso. El alcalde explicó que la reunión se había celebrado en un clima de buena sintonía. "Se ha dado un paso muy importante: ya tenemos el trazado, el coste económico y el método de ejecución de la obra". Y añadió: "Ya no hay más argumentos para retrasar la firma del convenio", ante el diputado de Obras Públicas, Luis Zarrabeitia, y la directora general de Infraestructuras del Transporte del Gobierno vasco, Mirari Arruabarrena, también presentes.
Para cubrir el presupuesto de 476 millones de euros se cuenta, en principio, con 138,5 millones que aportaría el Ministerio de Fomento y 106 de las plusvalías que supondrá la urbanización del terreno liberado, 195.000 metros cuadrados. La mitad de esta superficie ha sido cedida gratis por Fomento. Además, se valora el compromiso del Gobierno vasco de apoyar la estación intermodal, ya que ha propuesto esta solución para la llegada del tren de alta velocidad a las tres capitales. De momento, dado el pésimo estado en el que se encuentra la terminal de autobuses, el primer paso será poner en marcha la primera fase de la estación intermodal.
El soterramiento dejará liberado en la zona sur de la ciudad, y en sentido este-oeste, un gran bulevar de tres kilómetros de largo por 30 metros de ancho, con tranvía y carril-bici, que dejará la calle Dato y adyacentes como centro comercial.
Está prevista la construcción de 1.450 viviendas, de las que el 60% serán libres, el 20%, de protección oficial, y el resto, de precio tasado. Además, se prevé que 68.000 metros cuadrados se destinen a hoteles, oficinas y espacios comerciales. Este nuevo barrio, vinculado al primer ensanche de Vitoria, contará con un gran aparcamiento de 750 plazas en el entorno de la calle Dato.
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