"Acabo de matar a mi mujer"

"En el día del amor... ¡Ni amor ni nada!", se lamentaba ayer una vecina del barrio de La Poveda, en Arganda del Rey (31.000 habitantes). Apenas tres horas antes, María Sagrario Díaz Elez, de 46 años, había muerto en su casa víctima de varias puñaladas. Su marido, José Eladio Fernández García, de 49 años, fue detenido en la calle poco después. Volvía de la empresa de limpieza donde trabajaba la víctima. Se presentó allí y aseguró: "Acabo de matar a mi mujer. Ya podéis llamar a la Guardia Civil", según relataron al menos cuatro testigos indirectos del suceso.

Los empleados de la oficina llamaron al 112, que a su vez avisó a la Guardia Civil y al SUMMA. Cuando los sanitarios llegaron al número 1 de la avenida del Niño Jesús encontraron a Sagrario ya muerta y con "múltiples heridas de arma blanca", según un portavoz de Emergencias 112. Tras comprobar que lo que contaba Eladio era cierto, la Guardia Civil lo detuvo a pocos metros de su casa.

El matrimonio se estaba separando, pero todavía vivía en la misma casa

Los vecinos aseguran que el matrimonio se estaba separando, pero todavía convivía bajo el mismo techo. A la Guardia Civil no le consta que Sagrario denunciara a su marido por malos tratos. Los vecinos aseguraban ayer que nunca habían oído discusiones entre ellos. "Yo veía desde mi ventana cómo se sentaban a cenar juntos", relataba Carmen, una vecina del bloque de enfrente. Eladio estaba jubilado por problemas de salud. Había sufrido varios infartos y estaba operado del corazón. Ayer permanecía detenido en el puesto de la Guardia Civil de Arganda del Rey a la espera de que hoy le tomen declaración.

Un cartel de "se vende" colgaba ayer del balcón de ladrillo visto del 3º D. El matrimonio había puesto en venta el piso a mediados de enero. En el barrio comentaban que "a muy buen precio porque urgía venderlo". La única hija de la pareja, profesora de inglés en un colegio de Campo Real, estaba independizada desde hacía dos años. Llegó al domicilio de sus padres poco después del crimen. Allí los sanitarios del SUMMA tuvieron que atenderla por una crisis de ansiedad. El barrio entero estaba indignado. Muchos vecinos conocían a la pareja, que vivía en La Poveda hacía más de dos décadas. "Se les veía muy normales, como se suele decir en estos casos", comentaba una vecina. "Muy normales hasta que ellos dejan de serlo", terciaba otra.

Con la de ayer son ya 12 las mujeres muertas a manos de sus parejas en España en lo que va de año. Cuatro de los crímenes se han cometido en la Comunidad de Madrid; dos en Alcalá de Henares y el tercero en la capital, aunque este último la muerte de una joven peruana tras caer de un quinto piso sigue investigándose.

La Junta de Portavoces del Ayuntamiento de Arganda se reunió de urgencia ayer tras conocer el suceso. La concejal de Igualdad, Concepción Pérez, que además es vecina de La Poveda, anunció una concentración de repulsa por el asesinato para hoy a mediodía.