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Palau i Fabre encabeza el desembarco del Llull en Madrid

Las obras teatrales de Josep Palau i Fabre han sido escasamente representadas. Este olvido se romperá en breve. Curiosamente no será en Cataluña, sino en Madrid, gracias a la complicidad entre Hermann Bonnín y Mario Gas, director del Teatro Español madrileño. Allí se podrá ver, entre el 15 de febrero y el 23 de marzo, Don Juan, príncipe de las tinieblas, un montaje dirigido por el primero que reúne cinco piezas breves de Palau i Fabre sobre el mito del Tenorio. El estreno va acompañado de un programa de actividades paralelas que incluye debates, recitales de poesía y una exposición biográfica.

Don Juan... se presentó ayer a la prensa en la Fundación Palau de Caldes d'Estrac, si bien el autor excusó su ausencia por motivos de salud. El director del Instituto Ramon Llull, Josep Bargalló, aprovechó la ocasión para trazar futuras estrategias de difusión de la literatura catalana en la era post-Francfort. "El año 2008 será el del desembarco del Ramon Llull en Madrid", dijo. "Sin ser persistentes en Madrid, difícilmente seremos conocidos en el resto del mundo. Nuestra literatura necesita el altavoz de Madrid", remachó Bargalló, quien también citó París y Nueva York como ciudades prioritarias. Lo de representar a Palau i Fabre en Madrid, y no en Cataluña, no deja de ser una cuestión espinosa, como quedó claro en la intervención de la actriz Monserrat Carulla, protagonista de uno de los recitales: "Se tendría que preguntar a los directores del Nacional, del Lliure y del Romea por qué no representan a los dramaturgos catalanes".

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