Los urbanistas replantean la ciudad

Hoy se cierra en Córdoba la II Conferencia Europea sobre Ciudad y Cultura. La invención de las ciudades. El encuentro, que organiza por segundo año consecutivo el Ayuntamiento cordobés, pretende replantear los parámetros sobre los que se aborda actualmente la construcción de las urbes y el efecto que tienen los grandes eventos culturales en las ciudades.

Arquitectos, urbanistas y profesores universitarios han ofrecido su visión sobre estos asuntos durante esta semana. El encargado de abrir el congreso el pasado 4 de febrero fue el geógrafo David Harvey. Este investigador considera que el desarrollo urbanístico en el litoral español ha supuesto "un desastre medioambiental". En su opinión, "parece increíble cómo se ha podido llevar a cabo todo ese desarrollo urbanístico". "Sospecho que la corrupción ha tenido mucho que ver". La solución para este problema es complicada según este profesor británico.

"Los ciudadanos han adquirido derechos sobre esas viviendas no se les puede decir ahora que las casas deben desaparecer por motivos medioambientales", sostiene Harvey.

Además del urbanista inglés, Manuel Delgado, profesor de Antropología de la Universidad de Barcelona, participó también en la apertura del congreso con la conferencia El espacio público ideología. Nuevos discursos para el control social en contextos urbanos.

El encuentro se ha estructurado a partir de conferencias y de mesas de trabajo. En los debates, además de Harvey y Delgado, han participado, entre otros, la arquitecta catalana Zaida Muxí, quien denunció como muchos espacios públicos de las ciudades han dejado de pertenecer a los vecinos y han sido tomados por quienes "pagan más" por utilizarlos. En el congreso también han intervenido otros arquitectos como Enrique Sobejano, quien actualmente se encarga junto a Fuensanta Nieto de la construcción del futuro Espacio de Creación Artística de Córdoba.

Uno de los asuntos recurrentes abordado durante las jornadas ha sido el peligro que puede suponer para las ciudades la organización de grandes eventos. Córdoba aspira a convertirse en 2016 en la capital europea de la cultura. Y los expertos alertan de que este tipo de eventos puede provocar la banalización de la cultura o la pérdida de la personalidad propia de la urbe.