El Supremo se reúne de urgencia para decidir si suspende a ANV antes del 9-M

La batalla judicial y política para ilegalizar a la izquierda independentista vasca (ANV y PCTV) que no condena los crímenes de ETA arrancó ayer. El Gobierno pasó de la amenaza a la acción -presentó ante el Supremo sendas demandas para poner fuera de juego a ambos partidos- al mismo tiempo que ANV hacía firme su anuncio de estar en las elecciones registrando sus listas en la Junta Electoral Provincial en el primer día hábil para ello. Se avecinan días de máxima tensión política y jurídica.

El Gobierno quiere forzar la máquina y ha pedido medidas cautelares urgentes para evitar la proclamación de candidaturas de ANV. Por eso, la Sala Especial del Tribunal Supremo se reunirá de urgencia mañana mismo a las diez para decidir si, como pide el Ejecutivo y la Fiscalía General del Estado, se cierran todas las puertas a la participación de ANV en los comicios del 9 de marzo.

El desafío de ANV se concretó ayer cuando la portavoz de este partido, Miren Legorburu, presentó en San Sebastián las listas al Congreso y al Senado con las que pretende llevar a Madrid "la voz de la independencia". Legorburu precisó, poco antes de presentar la lista ante la Junta Electoral Provincial, que su intención es que "sepan en Madrid que Euskal Herria es una nación", informa desde Vitoria Pedro Gorospe. Legorburu argumentó que los 200.000 votos que ANV obtuvo en las elecciones municipales y forales, aunque la mitad de sus candidaturas fueron ilegalizadas, demuestran que "el pueblo vasco no acepta las ilegalizaciones".

La Sala Especial del Supremo encargada de aplicar la Ley de Partidos tendrá que pronunciarse a partir del viernes sobre las demandas de ilegalización del PCTV y ANV y, en especial, sobre la petición de suspensión de presentarse a las elecciones que han solicitado la Fiscalía General y la Abogacía del Estado.

La Sala Especial de 16 magistrados estará encabezada por el presidente del Supremo y de ella forman parte los presidentes de las cinco salas del alto tribunal y los magistrados más antiguo y moderno de cada sala. Según fuentes del alto tribunal, de la reunión podría salir la decisión de admitir a trámite las demandas, el nombramiento de ponentes y el emplazamiento a las partes.

El abogado general del Estado, Joaquín de Fuentes Bardají, presentó ayer los escritos de ilegalización del PCTV y ANV, en las que incluye, por primera vez, pide que se corte a ambos cualquier vía de financiación pública. También reclama la suspensión del derecho a presentar candidaturas (ANV ya lo ha hecho) o, en su caso, de la proclamación de las mismas, así como el embargo de cuentas corrientes, depósitos y activos financieros del PCTV y de ANV.

Para el representante del Gobierno, los vínculos del PCTV con Batasuna comportaban "una total sumisión, con desaparición de cualquier atisbo de voluntad propia del PCTV". Pero tras las últimas investigaciones, el PCTV figura como integrado dentro de la estructura de la banda armada, dependiendo jerárquicamente del frente político. El abogado del Estado concluye con rotundidad que el PCTV "no es más que un satélite del frente político de ETA".

Por su parte, alega que ANV fue utilizada para burlar la ilegalización y aunque ha querido aparecer entroncado con un partido republicano de 1930, en realidad no ha hecho más que "arrojar tinta de calamar" al servicio de "los fines terroristas de ETA". Así, "lo que ANV plantea en las instituciones, Batasuna lo reivindica en la calle y Segi -la organización juvenil de Batasuna- añade el elemento coactivo". También ha prestado "un apoyo explícito y directo a la organización terrorista" con la constitución en sus ayuntamientos de comisiones de "presos" y "represaliados".

Por otra parte, una decena de miembros de las Juventudes de Esquerra Republicana (JERC) irrumpieron ayer en la conferencia que ofreció en Barcelona el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo. Los jóvenes mostraron una pancarta en la que protestaban por la ilegalización de ANV y PCTV. Los servicios de seguridad expulsaron a los alborotadores de la sala. Fernández Bermejo recordó su época universitaria, cuando "la extrema derecha intentaba impedir las asambleas de estudiantes", y celebró que "se haya ganado la batalla" de la democracia.