Hallado el cadáver de un joven devorado por sus perros
Los canes se encontraron también muertos en la casa
Hacía semanas que nadie le veía. Era un joven serio, poco hablador, educado, algo esquivo. Pero el olor que salía de su vivienda se hizo insoportable. Nadie contestaba al timbre. No se oía nada. La dueña del piso no conseguía que le abrieran la puerta para reclamar el alquiler pendiente. A las 11.30 del lunes, la policía acudió a la puerta ocho del número 31 de la calle de Juan Ramón Jiménez, en el barrio de Malilla de Valencia. Les acompañaba un cerrajero y la propietaria. Al abrir, el escenario, dijeron ayer los vecinos, "era horroroso, por lo que comentó la policía".
Del joven inquilino, de 25 años, sólo quedaban restos óseos esparcidos por toda la casa. Nada más entrar, uno de sus perros yacía muerto. A pocos metros, en un sofá, el otro. Tenía un rottweiler y un pitbull, uno blanco y otro negro; cada mañana se cruzaba con algunos vecinos cuando los sacaba a pasear. Se comieron a su dueño. Entre ellos ni se mordieron. Del joven, según fuentes policiales, será difícil determinar la causa de la muerte. Sólo quedan huesos y algún resto de piel. La prueba de ADN confirmará, según explicaron las mismas fuentes, que el fallecido es la misma persona que figura en el contrato de arrendamiento.
Eva, vecina de la primera planta, explicaba ayer que hacía días que no veía al fallecido, tal vez semanas, que se saludaban, pero nada más. En el bar que está justo en la esquina, a menos de diez metros del edificio, no se hablaba ayer de otra cosa. Habían sido testigos del despliegue policial y la sorpresa de los vecinos. "Algunos comentaban que el olor era muy fuerte desde hacía días, pero poco más. Pasaba desapercibido, nadie sabía a qué se dedicaba, siempre iba solo, compraba en el horno de mi cuñada y jamás tuvieron una conversación sobre nada", explicó una camarera.
La policía no pudo confirmar ayer cuánto tiempo llevaba muerta la víctima, pero el alquiler dejó de pagarlo hace tres meses.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.