"No ha sido un año fácil"

Joan Saura prefirió ayer la expresión en negativo para resumir sus sensaciones tras un año al frente de Interior: "No ha sido un año fácil". Las dificultades empezaron, dijo, nada más ser nombrado máximo responsable de los Mossos d'Esquadra. Saura recordó las "críticas" que recibió de la oposición y aseguró que su gestión ha conseguido "deslegitimar las voces de quienes cuestionaban la capacidad de ICV-EUiA para gestionar los temas de seguridad". Estas afirmaciones las realizó Saura en el transcurso de una conferencia pronunciada en el Palau de la Generalitat.

Una vez "superados los prejuicios", la situación "se ha normalizado", dijo. De un modo discreto y breve, Saura citó los factores que provocaron aquel revuelo: "Algunos hechos delictivos de mucho eco mediático" (los asaltos a viviendas), las "precampañas electorales" (los comicios municipales primero y los sindicales después) y "unas primeras decisiones delicadas", en alusión al caso de Les Corts. Interior decidió instalar cámaras ocultas en la comisaría barcelonesa por las denuncias de malos tratos a detenidos. El propio departamento hizo públicos los dos casos detectados, hecho que generó un hondo malestar en el seno de los Mossos. Los representantes de los policías denunciaron ser víctimas de un "linchamiento" y protestaron al unísono en una multitudinaria manifestación que pasó frente a la sede del departamento.

"Ante los casos de malos tratos, aparece un dilema: optar por el síndrome del avestruz o asumir el riesgo de la publicidad y la transparencia", dijo el ex fiscal jefe de Cataluña José María Mena, que presentó la conferencia de Saura.

Mena criticó el "gremialismo" ante los supuestos abusos policiales y aseguró que el caso de Les Corts "acredita la madurez democrática de Cataluña". "Ladran, consejero, luego cabalgamos", zanjó el ex fiscal jefe.

En un lenguaje menos concreto y material y mucho más burocrático, Saura dibujó un balance "positivo" de su gestión y subrayó una vez más que "Cataluña es un país razonablemente seguro". Admitió, eso sí, que "el fenómeno de la amenaza terrorista está presente" y que, por ello, Cataluña está "en riesgo". El consejero ecosocialista pidió a los partidos políticos que "no conviertan la seguridad y el terrorismo en material electoralista", en alusión a la reciente detención de 14 islamistas radicales en el Raval de Barcelona.