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Reportaje:

Las proclamas sindicales del Falla

El Carnaval canta a los derechos de los marineros y los despedidos de Delphi

El Carnaval de Cádiz rastrea en las anécdotas más divertidas del año pero nunca se olvida de escarbar en los problemas cotidianos o en las tragedias humanas. Las letras del concurso oficial de agrupaciones del Teatro Falla, que el jueves inició su fase de cuartos de final, han recordado estos primeros días el cierre de la fábrica de Delphi en Puerto Real o el naufragio del pesquero barbateño Nuevo Pepita Aurora, en el que fallecieron ocho marineros. Las coplas se han vuelto proclamas sindicales.

De vez en cuando, el Carnaval se pone serio. El cerrojazo de Delphi dio la idea este año a Amnistía Internacional que, junto a la Asociación de Autores, convoca desde el concurso de 2007 un premio a las coplas dedicadas a algún punto de la Declaración de Derechos Humanos. En esta ocasión, el galardón será para la mejor letra sobre el artículo 23, el derecho a un trabajo digno. En el Falla se han oído ya casi una decena de candidatas.

"Por eso al obrero le llegan sólo cartas de despido", dice un pasodoble

La chirigota de Manolo Santander Los Bichos arrancó numerosos aplausos con un pasodoble en el que cuestionaba a un país que se vuelca en el adiós a los ricos y famosos pero olvida a los anónimos que se dejan la vida en el tajo. "Hasta en la muerte manda el dinero y si se ha enterrado a un muchacho forrado de millones, en Barbate se matan los hombres por seis boquerones". El hundimiento del Nuevo Pepita Aurora también inspiró al comparsista Joaquín Quiñones para escribirle a su agrupación El Mercado de las Maravillas: "Quiero preguntarle a la reina de los mares donde estaba aquella tarde cuando a un barco de Barbate lo tumbó los temporales".

Los Pito-risas, una de las chirigotas que más han gustado en la primera fase del concurso, se sirvió de su disfraz de adivinas para reclamar derechos laborales en una provincia a la que pintan un futuro "más negro que los huevos de Robinho". En su pasodoble añaden: "Sin cartas de credenciales, tus cartas van al olvido. Por eso al obrero le llegan sólo cartas de despido".

La chirigota de El Selu, To pa Ella,representa a unos hombres recién divorciados, cuyas ex mujeres se lo han llevado todo. Curiosamente estos carnavales también han cantado mucho a las separaciones matrimoniales. Las chirigotas han buscado el lado más burlón. Las comparsas han analizado las consecuencias más negativas.

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El Mercado de las Maravillas le buscó la sensibilidad al público del Falla con un pasodoble que protagoniza una niña cuyos padres se acaban de separar. "Lo que daría en mi cumpleaños por cantar, cortar la tarta y poderte ver, papá". El concurso se extenderá hasta el 1 de febrero.

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