Un profesor y un ex cocinero, los ideólogos de la célula
Adoctrinar a los jóvenes para que sean buenos musulmanes y extender el islam a toda costa. Ésa es la guía vital de los dos máximos responsables de la presunta célula yihadista desarticulada en Barcelona. Maroof Ahmed Mirza, de 39 años y natural del Punjab, y Mohammad Ayub Elahi Bibi, de 62 años y también paquistaní, ejercían el liderazgo espiritual e ideológico del grupo. Por eso gozaban del respeto de los seguidores de Tabligh e Jamaa, corriente integrista del Islam.
Maroof Ahmed es profesor. Instruye a niños sobre los versículos del Corán en la mezquita de la calle de Hospital, registrada por la Guardia Civil en El Raval. Lleva 12 años en Barcelona. Está casado y tiene cuatro hijas pequeñas. Pero dedica más tiempo de su vida a la religión que a la familia, que ayer se reunió para hablar del encarcelamiento del padre. "Es inocente", reiteró su cuñado Faisal -la esposa rehusó hablar sin la presencia de un varón en casa- a pesar de que está acusado de ser el organizador de los atentados. El hombre había sido segundo imán de la citada mezquita. Pero, por circunstancias que nadie pudo aclarar ayer, fue apartado del cargo hace dos años.
La misma pátina doctrinal caracteriza a Mohammad Ayub. Pasó la mitad de su vida trabajando de cocinero en el mismo restaurante del centro de Barcelona. Desde que se jubiló, consagró su existencia a la oración y al estudio profundo del Islam. Mohammad, admite su hijo Nadeem, solía parar por la calle a jóvenes musulmanes que no acudían con regularidad a la mezquita, que vendían latas de cerveza los fines de semana o que osaban dar un paseo con una mujer española.
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