Los fiscales evitan Alicante por el exceso de trabajo
Los concursos convocados para cubrir 18 plazas quedan desiertos
Un tercio de la plantilla de fiscales de Alicante (81 funcionarios en total) es interina. Este dato y el hecho de que los dos últimos concursos públicos para cubrir en propiedad las vacantes (18 plazas) hayan quedado desiertos revelan el desinterés de los representantes del ministerio público por afincarse en Alicante. El fiscal jefe de la Audiencia de Alicante, José Antonio Romero, apunta directamente al "exceso de trabajo" como causa de este explícito rechazo de los fiscales a consolidar su currículo laboral en esta provincia: "Aparte del elevado nivel de interinidad, hay otro dato que constata el volumen de trabajo de esta Fiscalía: el 70% de la plantilla cobra plus de productividad, es decir, que tiene que cubrir más guardias y echar más horas extra", argumenta Romero.
El 70% de los fiscales cobra plus de productividad y por horas extra
El fiscal jefe apoya su aseveración sobre el exceso de carga de trabajo de la Fiscalía de Alicante en dos estadísticas: la Memoria de la Fiscalía General del Estado correspondiente a 2006 (la de 2007 está en fase de elaboración) y la estadística del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) sobre la litigiosidad de los juzgados españoles en el último trimestre de 2007.
La memoria de la Fiscalía refleja que los profesionales de Alicante realizaron un total de 13.515 escritos de calificación. El dato sólo es superado por la Fiscalía de Madrid (con 25.051 escritos) y Barcelona (con 21.135). Este tercer puesto de la lista en valores absolutos se convierte en el primero en términos porcentuales, ya que la plantilla de Alicante es sensiblemente inferior a la de Barcelona y Madrid, con más de 200 funcionarios en cada una de las demarcaciones. La carga de los fiscales de Alicante en este apartado también es superior a sus colegas de Valencia, que en 2006 presentaron un total de 10.101 escritos repartidos entre 107 funcionarios.
La Fiscalía, además, esgrime el dato del número de diligencias previas por provincias como argumento de la carga de trabajo. En esa lista, Alicante ocupó en 2006 la quinta posición, por detrás de Madrid, Barcelona, Sevilla y Valencia. En concreto, en esa fecha los fiscales de Alicante tramitaron un total de 228.587 diligencias previas, lo que significó un incremento del 9,35% respecto a 2005.
La segunda estadística a la que se agarra el fiscal jefe para explicar el rechazo a ocupar en propiedad las vacantes en esta demarcación, y en especial en los partidos judiciales de Torrevieja y Benidorm, son los elevados índices de litigiosidad. Según los datos del CGPJ correspondiente al último trimestre del pasado año, la tasa de litigios penales en la provincia de Alicante se situó en el 42,23%, ocho puntos por encima de la media nacional, establecida en el 34,903%. Este índice sólo fue superado por los juzgados de Ceuta, Baleares, Granada, Málaga y Tarragona.
El último concurso público para cubrir vacantes de fiscales en Alicante se aprobó en noviembre pasado. Las 10 plazas que se ofrecían quedaron vacías, salvo una de Elche que en realidad fue un ascenso. Así, esos nueve puestos, más otras ocho plazas de un concurso anterior se han ocupado por sustitutos.
El fiscal jefe de Alicante descarta la precariedad de medios de los distintos destacamentos del ministerio público como causa de la reticencia de los profesionales a trabajar en Alicante. "Los medios son similares al resto de provincias, una vez subsanadas las deficiencias de Torrevieja o Benidorm", puntualiza Romero. "Por tanto, si no quieren venir a trabajar aquí, tendremos que seguir tirando con los sustitutos", concluye en alusión a los 28 representantes del ministerio público que son interinos.
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