Un colegio retrasa sus obras por el derrumbe del Sagrado Corazón

El derrumbe fortuito y la posterior clausura del colegio concertado Sagrado Corazón el pasado 25 de diciembre ha causado daños colaterales en otro centro, el colegio público Palacio Valdés. Esta escuela, ubicada en el paseo del Prado, tenía prevista una obra de rehabilitación por valor de 1.089.999 euros a cargo del Ayuntamiento de Madrid, fruto de un convenio con la Consejería de Educación. Mientras se produjeran los trabajos, estaba previsto el traslado de los alumnos al colegio público Miguel Hernández, un centro que utiliza Educación como comodín para estas situaciones. Sin embargo, el cambio se demorará. El próximo lunes, los estudiantes de secundaria y bachillerato del Sagrado Corazón (ubicado en el distrito de Chamartín) serán quienes ocupen las aulas del Miguel Hernández (Latina).

Los alumnos del centro público iban a trasladar las clases al Miguel Hernández

"Nos preocupa que se perjudique al Palacio Valdés", opina CC OO

Educación asegura que no se han pospuesto ningunas obras en el Palacio Valdés. Un portavoz asegura que los trabajos se preveían "para el último trimestre del curso", esto es, aproximadamente después de Semana Santa. Sin embargo, el acta sindical de una reunión celebrada el pasado 23 de octubre entre los representantes de los sindicatos de los profesores de Madrid capital y el director de área territorial, Bonifacio Alcañiz, revela que Ayuntamiento y consejería tenían previsto iniciar las obras el presente mes de enero.

La representante de CC OO en esa reunión, Ana Parra, recuerda: "Ahora dirán lo que quieran, pero nos aseguraron que empezarían las obras del Palacio Valdés en enero, no después de Semana Santa. Y dijeron que los alumnos irían al Miguel Hernández, que iba a quedar vacío a finales de año porque lo abandonaban los estudiantes de otro colegio público, el Concepción Arenal, que había estado en obras".

En la consejería insisten en que "hay tiempo hasta después de Semana Santa y alternativas para trasladar a los alumnos del Palacio Valdés a otro centro mientras se acometan las obras". Este periódico intentó ayer, sin éxito, conocer la versión de la responsable del centro público, quien se remitió a la Consejería de Educación como único portavoz autorizado.

Francisco García, secretario general de Educación en CC OO, cree que los trabajos se han retrasado y que no estaban previstos para después de Semana Santa. Con todo, García considera correcta la actuación de Educación en cuanto a ofrecer una solución a los alumnos del Sagrado Corazón. "Me parece bien. Pero lo que nos preocupa es que se perjudique al Palacio Valdés, retrasando una obra necesaria".

Por otra parte, y en contra de lo previsto, la escuela infantil Valle de Oro siguió ayer en pie. Educación no llevó a cabo el derribo del centro de Carabanchel en cuyo edificio se han encontrado importantes deficiencias. Comisiones Obreras se opone al derribo de este centro público porque, argumentan, Educación no ha entregado a los afectados un informe pericial que exija la demolición del edificio, en mal estado, en lugar de su reforma.

Algunos de los padres de los 60 menores de tres años afectados se reunieron de nuevo en el centro para decidir acciones que salven su escuela de barrio. Rechazan la alternativa propuesta por Educación de trasladar a los pequeños a otra guardería del distrito, Cinco Lobitos, informa Pilar Álvarez.