Los peritos discrepan sobre las heridas del urbano en coma
Los peritos discreparon ayer sobre el origen de las heridas del guardia urbano que quedó en coma durante los altercados del 4 de febrero de 2006 en Barcelona. Así, las dos forenses adscritas al juzgado que instruyó la causa aseguraron que las lesiones del agente son "perfectamente" compatibles con el impacto en la frente de un objeto contundente, como una piedra, y con un posterior golpe en la nuca al caer de espaldas al suelo, tal como mantiene la fiscalía.
Las doctoras explicaron que el policía está en estado vegetativo y postrado en una cama, con pérdida del nivel de conciencia, pero con posibilidad de abrir los ojos y emitir sonidos.
Por su parte, los peritos de las defensas de los tres jóvenes encarcelados aseguraron que "tiene mayor explicación" un golpe inicial de "bastante intensidad" en la nuca y una posterior caída hacia delante, ya que, de lo contrario, sería más "razonable" que tuviera una herida cutánea más grave en la frente. Esta explicación abona la tesis de la defensa de que las heridas fueron causadas por un objeto lanzado desde una casa okupa.
