ERC pretende "actualizar" el acuerdo de Gobierno un año después de firmarlo

El Partit dels Socialistes, Esquerra Republicana e Iniciativa-Esquerra Unida firmaban hace apenas trece meses el pacto que alumbró el Gobierno de Entesa, la reedición del tripartito de la izquierda en Cataluña. El acuerdo fue firmado para orientar las políticas de la Generalitat para toda la legislatura, que se supone de cuatro años. Pero ERC, en puertas de una nueva campaña electoral, ha cambiado de opinión. El secretario general del partido y consejero de Gobernación de la Generalitat, Joan Puigcercós, llamó ayer a "actualizar" al pacto para, según dijo en una entrevista a Efe, "prever escenarios de futuro", entre ellos un eventual revés del Tribunal Constitucional al Estatuto catalán.

La propuesta de Puigcercós sorprendió y molestó a sus socios de Gobierno, que encuadran la propuesta en el ámbito puramente "electoralista". El órdago tampoco se explica sin tener en cuenta la situación interna de Esquerra Republicana. Los sectores más radicales del partido consideran que el acuerdo con el PSC perjudica sus aspiraciones independentistas y desdibuja su perfil. Estos sectores lograron un apoyo nada despreciable a su propuesta en la conferencia nacional de ERC, de octubre. El 43% de los delegados votaron renegociar el acuerdo de Entesa. Puigcercós se negó entonces a darles su apoyo, pero ahora les lanza un guiño con vistas al congreso de ERC de 2008, en el que Puigcercós se plantea disputar el liderazgo del partido a Josep Lluís Carod Rovira.

Sea como sea, los socios de ERC en el Gobierno catalán mostraron ayer su malestar con la propuesta de Puigcercós. "Cuando uno quiere plantear estas cosas lo hace en una mesa de negociación y a puerta cerrada, no en los medios de comunicación", dijo el vicepresidente de Iniciativa-Esquerra Unida, Jordi Guillot.

Precisamente, y también a petición de ERC, los tres socios del Ejecutivo de José Montilla se reunirán el próximo 9 de enero para hacer un seguimiento del pacto firmado el año pasado. La reunión la pidió ERC también después de las presiones de los sectores críticos del partido.