Cuatro jóvenes graban las vejaciones a un minusválido
La Guardia Civil de la localidad coruñesa de Arteixo ha detenido a cuatro jóvenes, algunos de ellos menores de edad, por practicar vejaciones a un disminuido psíquico, vecino de la parroquia arteixana de Pastoriza, grabar su acción y difundir la secuencia a través de Internet, en el portal YouTube. Los agresores, que ya fueron puestos en libertad con cargos, obligaron a su vecino, de 21 años y con una valoración de su minusvalía del 40%, a correr desnudo por un descampado y a comer plátanos con su monda.
Pero además, los detenidos lo apedrearon y le provocaron quemaduras al apagar colillas en su lengua e introducir cigarrillos encendidos por sus orificios nasales. Las imágenes, que se difundieron en la Red hasta el sábado, eran de enorme crueldad y llevaban como banda sonora los gritos, insultos y carcajadas de varios chicos, probablemente más que los cuatro que fueron detenidos en Arteixo. Según fuentes de la Guardia Civil, hay, además, otras personas, chicos y chicas, supuestamente implicadas en la grabación o que al menos presenciaron la escena sin tratar de impedirla. La mayoría de estos jóvenes, según los agentes, ya han sido identificados.
"No se dio cuenta"
Una hermana de la víctima declaraba ayer a Televisión de Galicia que "ver las imágenes de la tortura fue impactante" para todos los miembros de la familia que fueron capaces de verlas, pero no solamente, "por lo mucho que abusaron de alguien tan cercano, y que además es retrasado", sino, sobre todo, "porque en todo el tiempo él no se dio cuenta de nada de lo que le estaban haciendo", de que se estaban riendo de su situación de inferioridad. "Eso fue lo más fuerte", concluyó la hermana, que a aprovechó para pedir ayuda a las administraciones para el joven discapacitado.
"La familia no ve salida posible para él", explicó la joven, "con 21 años tiene la mentalidad de un niño de tres. Necesita apoyo de terapeutas y de psicólogos, algún tipo de estímulo que desarrolle un poquito más las pocas posibilidades que él tiene".
La familia de la víctima, de iniciales P. P. G., fue avisada de los hechos por la Guardia Civil. No obstante, varios días antes ya sospechaba que "algo había pasado" porque el joven regresó a casa con contusiones y quemaduras.
