Navidades con contrato temporal

La radiografía de las contrataciones temporales en las fechas navideñas es casi una foto fija en los últimos años en España. Esta vez, sin embargo, un elemento viene a romper la homogeneidad respecto a fiestas anteriores: las previsiones de tirón que va a experimentar el comercio electrónico, propiciado por el incremento de los precios de los productos en las tiendas, en especial la alimentación, lo que da lugar a que crezcan los que optan por sumergirse en Internet en busca de gangas e importes más asequibles. Una circunstancia que se traduce en un mayor número de contratos para desempeñar tareas de distribución y logística de envíos y paquetería.

Según José María Jurado, director de Organización, Selección y Calidad de la empresa de servicios de empleo Adecco, las firmas de trabajo temporal, que llevan a cabo la gran mayoría de contrataciones en esta época, gestionarán estas navidades en España en torno a 185.000 contratos temporales. De ellos, un 50% será de corta duración (la mayoría de 7 u 8 días) y el otro 50% de entre uno y tres meses. Los jóvenes de 18 a 25 años firmarán casi la mitad de esos contratos, muchos de ellos en busca de un sobresueldo en tareas para las que no se exige experiencia previa. Adecco tiene previsto realizar unos 50.000 contratos entre diciembre y enero, un 10% más que en las pasadas fiestas.

Los jóvenes de 18 a 25 años firmarán casi la mitad de los contratos en busca de un sobresueldo en tareas para las que no se exige experiencia

El comercio sigue siendo el que más tira de las contrataciones navideñas: el número de clientes se multiplica por dos respecto al resto del año

El repunte del comercio electrónico se traduce en la necesidad de cubrir algunas posiciones de teleoperador, pero sobre todo, y dado que las compras en la Red no suelen requerir la ayuda de terceras personas, de lo que va a tirar es de perfiles como peones, mozos de almacén, manipuladores, preparadores de pedidos, carretilleros y administrativos para el control de albaranes y facturación, explica José María Jurado. "Dejando claro que el ritual de acercarse a los comercios sigue estando ahí, está claro que la banda ancha ha acercado Internet a la gente, que cuenta ahora con más opciones y ofertas para elegir en la Red, además de mayor comodidad y más posibilidades de ahorro", indica el directivo de Adecco.

Independientemente de esta circunstancia algo novedosa, los departamentos de distribución y logística de paquetería y correspondencia están en plena ebullición. Un ejemplo es Correos, que tiene previsto acabar diciembre con 1.825 nuevos contratos de refuerzo para sus departamentos de clasificación, reparto y atención al público. Lo que se añade a las casi 60.000 horas extras que realizarán sus empleados habituales. Todo ello para repartir con la mayor presteza posible unos 500 millones de objetos postales.

Con todo, el comercio sigue siendo el que más tira de las contrataciones navideñas. El número de clientes en tiendas y grandes superficies se multiplica por dos respecto al resto del año, lo que requiere refuerzos en posiciones como reponedores de productos, empaquetadores, cajeros, dependientes (cuyos contratos suelen ser los más largos para enlazar con el periodo de rebajas que empieza después de Reyes), personal administrativo de almacén, comerciales y promotores de marketing.

El tirón comercial

En este último caso se encuentra Castellar Gutiérrez, quien desde el 3 de diciembre dispone de un contrato de tres meses en la aseguradora Adeslas. "Se trata de fechas buenas para promocionar productos y servicios", expone basándose en la experiencia adquirida en otras navidades, "porque todos estamos más receptivos y aumenta el consumo". Esto provoca que incluso sectores no necesariamente vinculados a los productos que más gasto generan por estas fechas, como es el caso de las aseguradoras, lancen promociones. En esta situación está ella. Su contratación en Adeslas, argumenta, se debe primordialmente a la puesta en marcha de nuevas acciones de marketing, publicidad y comunicación aprovechando, entre otros factores propicios, el gran consumo de televisión que se produce en este periodo del año.

Las aseguradoras son precisamente otro sector que vive un importante incremento de actividad, lo que obliga a reforzar ciertos puestos de trabajo. El aumento del número de siniestros y averías en carretera, con la consiguiente necesidad de atender partes de accidente y mover grúas, da lugar a numerosas contrataciones temporales. Animadores de fiestas, camareros y personal de aeropuertos y hoteles, así como contables y administrativos para el cierre de balances anuales, son otras posiciones que se requieren año tras año en esta época.

Según la empresa de trabajo temporal Alta Gestión, en 2006 los contratos a jóvenes de 18 a 25 años fueron el 43% del total de los realizados por esta firma en la campaña navideña, un porcentaje que más o menos se repetirá en 2007. Según fuentes de dicha compañía, la disponibilidad horaria, la capacidad de aprendizaje y las ganas de trabajar son las tres aportaciones principales de este colectivo joven.

Las propias empresas de trabajo temporal viven estas fechas con gran sobresalto y personal de refuerzo a punto. "Siempre tenemos preparado un equipo de personas para reaccionar de inmediato a todas las contingencias que se dan en Navidad. Es muy habitual que te llamen diciéndote: 'Mándame cinco reponedores para mañana'. También se dan muchos casos en los que las empresas tienen desviaciones respecto a sus previsiones y han de actuar sobre la marcha", explica José María Jurado. ¿Razones? "Es una época en la que hay más enfermedades y bajas que en otros momentos del año y, no lo olvidemos, también se sale más, lo que deriva en un repunte del absentismo laboral", responde. Además, "las empresas suelen ser prudentes en sus estimaciones previas en relación a la carga de trabajo que van a tener", lo que se traduce en prisas de última hora para encontrar personal disponible.