El PCE pierde dos batallas en su pugna por las listas de IU

La dirección del PCE, sector crítico de IU, sufrió ayer, en un mismo día, dos disgustos en su intento de hacerse un hueco en el futuro grupo parlamentario; y Gaspar Llamazares, coordinador general, obtuvo dos triunfos. Las listas electorales de IU en Valencia y Sevilla parecen virar a favor de Llamazares: en el primer caso, el Comité de Garantías federal ha anulado la designación del candidato, afín al PCE; en el segundo, unas primarias han dado la victoria al aspirante respaldado por Llamazares.

El Comité de Garantías de IU decidió el domingo anular la asamblea celebrada por la federación valenciana que había designado a Antonio Montalbán como cabeza de lista al Congreso por Valencia (una de las plazas en las que pueden obtener diputado), según confirmaron fuentes de IU. La dirección federal había impugnado la asamblea porque se había dejado fuera a un millar de militantes, críticos con el PCE, que supuestamente no pagaban sus cuotas.

Siglas diferentes

La dirección de Esquerra Unida del País Valencià rehusó pronunciarse ayer sobre esa resolución del Comité de Garantías alegando que aún no la conoce. Pero lo sucedido parece abocar a la formación de izquierdas a la ruptura. Si el PCE no acepta la anulación de su candidatura, podría darse la circunstancia de que IU, en Valencia, concurriera con siglas y listas diferentes a las elecciones: los afines al PCE (con Esquerra Unida) por un lado, y los afines a Llamazares (con el nombre de Iniciativa pel País Valencià) por otro.

Distinto es lo que ha ocurrido en Sevilla, otra plaza clave porque IU está a pocos votos de obtener allí diputado. Felipe Alcaraz, presidente ejecutivo del PCE, decidió ayer retirarse como candidato por Sevilla, después de obtener sólo el 28% del apoyo de las bases, frente a Sebastián Martín Recio, que logró un 71%. Alcaraz podría ser designado directamente por la asamblea de la federación obviando los resultados de las primarias, pero ayer declaró que no le parece "estético". En su decisión ha pesado la certeza de que la dirección federal no iba a ratificar su candidatura. "No quiero que por mí se abra una batalla política entre Andalucía y el aparato federal", señaló.

Alcaraz sostiene, no obstante, que el PCE "no ha perdido ninguna batalla". Y lanzó una advertencia: Valencia ha elegido a su candidato "según sus estatutos", y el Comité de Garantías "no tiene quórum para echar atrás esa decisión".