Telecom Italia recurre a la vieja guardia para su nueva etapa

Telecom Italia renovó ayer, al fin, su cúpula directiva. Gabriele Galateri di Genola y Franco Bernabé fueron designados como presidente y consejero delegado, respectivamente, por Mediobanca, la entidad líder del grupo italiano de Telco, sociedad que controla Telecom y en la que la española Telefónica posee un paquete mayoritario del 42%.

El Consejo de Administración de Telecom oficializará esta misma semana los nombramientos y podrá darse por concluido el bloqueo de la empresa de telecomunicaciones, semiparalizada desde que, en abril, Pirelli vendió su participación de control a Telefónica, Banca Intesa, San Paolo, Generali y Sintonia-Benetton, además de al tradicional accionista Mediobanca.

Franco Bernabé, de 59 años, el ejecutivo encargado de relanzar Telecom, es un veterano de la compañía. Ya fue consejero delegado entre 1998 y 1999, un momento tormentoso en el que Telecom, recién privatizada, intentaba oponerse a una OPA dirigida por los financieros Emilio Gnutti y Roberto Colanino. Bernabé, economista de la OCDE, administrador del Ente Nacional de Industria y alto ejecutivo de Fiat. Tras su marcha de Telecom, en 1999, asumió la vicepresidencia de Rothschild Europa.

Mandarín de la industria

Gabriele Galateri di Genola, de 60 años, nuevo presidente de Telecom, es, como Bernabé, un mandarín de la alta industria. Fue uno de los principales dirigentes de Fiat tras la muerte de Gianni Agnelli y sigue siendo hombre de confianza de la familia Agnelli. También es hombre de confianza de Mediobanca: presidía la entidad hasta el pasado verano. Y velará también por los intereses de Generali, otro de los accionistas de Telco-Telecom, ya que mantiene una vicepresidencia en la aseguradora.

Con el proceso de nombramientos, el grupo italiano de Telco ha ejercitado una de las funciones que le atribuye el acuerdo con Telefónica. La empresa española posee, por su parte, la última palabra en materia de modificaciones de la estructura accionarial, pago de dividendos y desinversiones. A Telefónica corresponderá ahora asumir el protagonismo como socio industrial casi omnipotente. Telecom apenas realizó inversiones para la renovación de sus infraestructuras durante la época de Marco Tronchetti Provera (Pirelli), acumula grandes deudas y está envuelta en un proceso por el presunto espionaje realizado por su anterior jefe de seguridad a centenares de personalidades.

El ministro de Comunicaciones, Paolo Gentiloni, expresó su satisfacción por el hecho de que Telecom tuviera "por fin una estructura directiva y accionarial estable" e hizo notar la "necesidad de fuertes inversiones" en la empresa.