"No sé si seguiré de ministra, pero sé que el PSOE va a ganar"

El Congreso de los Diputados vota hoy una propuesta de Iniciativa per Catalunya para reprobar a la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, quien no tiene previsto en su agenda acudir al Parlamento. Ayer, en los micrófonos de Radio Sevilla, admitió que la situación "no es agradable", aunque tampoco es nueva para esta mujer que comenzó su andadura política en la Junta de Andalucía al frente de la Consejería de Economía y Hacienda en 1994. "Cuando llegué a Andalucía me reprobaron a los 20 días y ganaron la votación en la época de la pinza", cuando el Gobierno andaluz carecía de mayoría parlamentaria.

Entonces, recordó, tuvo que seguir "con esa especie de presión a la espalda" y ahora está dispuesta a hacer lo mismo. "Haré lo que el presidente del Gobierno me diga y lo haré lo mejor posible", dijo en una entrevista con María Esperanza Sánchez, directora del programa La Opinión.

Álvarez aseguró que el capítulo de su reprobación, por el caos en el servicio ferroviario de cercanías en Barcelona, forma parte de una "estrategia política que tiene otro trasfondo". Pero no quiso ir más allá y evitó verbalizar si se debía a que los dirigentes políticos de Cataluña acarician la idea que sea un catalán el que lleve la cartera de Fomento.

Álvarez no negó esa impresión que sí han proclamado dirigentes socialistas andaluces como Carmen Hermosín y Rafael Román y recordó las ácidas palabras que le dirigió el diputado de Esquerra Republicana de Cataluña, Joan Puig, cuando le espetó en una comparecencia parlamentaria celebrada el pasado mes de agosto: "Usted fue a Cataluña como un señorito andaluz, repartiendo limosna".

La responsable de Fomento insistió en que existe "una estrategia política" para "tergiversar" lo ocurrido con el servicio ferroviario en Cataluña -las obras del AVE se compatibilizaron con el tránsito de los cercanías- y opinó que los ciudadanos no pasarán factura electoral al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero a tenor de los "correos electrónicos" y de la muestras de apoyo que recibe de ciudadanos de Cataluña. "Es más un planteamiento político y mediático que se retroalimentan", comentó.

Calificó de "injusto" y "sin fundamento" que desde su ministerio se haya primado la inversión en Andalucía frente a la de Cataluña. Ambas, dijo, han recibido lo que le correspondía por mandato de sus respectivos Estatutos de Autonomía y aseguró que "por órdenes" de Zapatero, Fomento ha intentado "compensar el déficit" de inversión pública en Andalucía durante los ocho años del Gobierno del PP.

Como todos los políticos en este país, la ministra de Fomento está en campaña electoral y aprovechó para asegurar que con un gobierno de Zapatero en la próxima legislatura el proyecto de unir por alta velocidad todas las capitales andaluzas se ejecutará: "Está clarísimo que cumplimos todo lo que decimos".

Sobre su futuro dijo: "No sé si voy a seguir de ministra, pero lo que sí sé es que el PSOE va a ganar a las elecciones".