El Montcau
Un día del pasado mes de octubre, los niños y niñas de cuarto curso de primaria de la escuela pública Els Xiprers hicieron una salida al parque natural de Sant Llorenç de Munt con el objetivo de estudiar sobre el terreno parte del relieve y de la geografía catalana. La excursión se completó con la ascensión al Montcau, de 1.056 metros de altitud y la segunda cima más alta del parque por detrás de La Mola (1.104). Allá arriba, desde el balcón privilegiado de la cumbre, los pequeños caminantes divisaron y fotografiaron las montañas y valles más emblemáticos del territorio. Otearon en el valle el pueblo de Sant Llorenç; al Este, la montaña de Montserrat; al Oeste, el Montseny; La Mola, al Sur; y al Norte, el Prepirineo. Por el contrario, el Pla de Bages estaba tapado por un mar de nubes, según contaron los pequeños a sus padres. En resumen, fue una fabulosa jornada.
El parque natural de Sant Llorenç de Munt es visitado por numerosos escolares por su contenido cultural y natural. Se trata de una ruta agradable al corazón del macizo siguiendo sus cotas más altas, una ruta familiar muy recomendable. Caminando por el sendero que lleva al Montcau y a la Mola, al caminante se le ocurren numerosas variantes y salidas para explorar las vertientes que rodean el parque. Sin duda alguna, es el itinerario para descubrir el parque.
Una recomendación importante antes de iniciar la excursión desde el collado de Estenalles, al que se llega en un vehículo y situado en el kilómetro 14 de la carretera de Terrassa a Navarcles (BV-1221), en pleno corazón del parque, es que hay que llevarse agua. Así lo hicieron todos los niños y niñas del Xiprers, bien aconsejados por su profe, Sergi.
Al collado de Estenalles hay que llegar pronto por la mañana para poder aparcar el coche, pese al amplio espacio que se dedica a los vehículos. Antes de comenzar a andar, se impone la parada al centro de información del parque del collado de Estenalles, una antigua caseta de obreros reconvertida para los servicios del parque en una exposición de la zona. Luego, sólo se trata de seguir el camino hacia arriba, primero hacia el Montcau, y luego hacia la Mola, pasando por el collado de Eres. En la Mola, los hambrientos pueden disfrutar de butifarras en la hospedería o, regresar dirección a Estenalles, para festejar una inolvidable comida en Can Carter de Mura.
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