Bruselas propone recortar las ayudas agrícolas a los grandes terratenientes
Los pagos se reducirían un 45% para quienes reciben más de 300.000 euros
La comisaria de Agricultura, Mariann Fischer Boel, desveló ayer sus planes para "modernizar" la Política Agrícola Común (PAC), que consume el gasto más importante de la UE. Los objetivos de la reforma son tres: reducir la cuantía de las subvenciones especialmente a los grandes terratenientes, con un sistema de pagos más simple y efectivo; adaptar las intervenciones a la realidad de la globalización y lograr que la agricultura europea contribuya a atenuar los efectos del cambio climático.
La agricultura europea representa el 4% del producto interior bruto (PIB) de la UE y el 8% del empleo. No obstante, el sector agroalimentario consume el 40% del presupuesto comunitario, que asciende a unos 100.000 millones de euros anuales. El desproporcionado reparto de las subvenciones es uno de los asuntos más polémicos y difíciles de reconducir. "El 18% de los beneficiarios obtuvo el 85% de los pagos en 2005", según Jack Thurston, cofundador de Farmsubsidy, una organización que investiga el fin de las subvenciones agrícolas de la UE.
La propuesta de la comisión, conocida como "chequeo a la PAC", que prevé el recorte de las subvenciones más cuantiosas es extremadamente prudente en sus planteamientos. "Convendría examinar la posibilidad de introducir una cierta limitación en los pagos tanto para los más importantes como para los más débiles", señala la comunicación de la comisión.
Con el típico lenguaje prudente por parte de Bruselas para este tipo de anuncios y como pie de página se propone "por ejemplo: reducción del 10% para los pagos superiores a los 100.000 euros; del 25% para los que superen los 200.000 y del 45% a partir de 300.000".
Boel precisó que "los países más afectados son Reino Unido; República Checa, Alemania y Dinamarca", por ser los países en los que la propiedad rural está más concentrada. En Alemania, por ejemplo existen grandes cooperativas agrícolas constituidas durante el periodo comunista. Para evitar resultados injustos, la comisión prevé diferenciar entre las granjas de multipropietarios con muchos trabajadores y las fincas de propietario único.
También prevé elevar el mínimo a tener derecho a subvención actualmente situado en 0,3 hectáreas hasta 1 o 1,5 hectáreas. "Tenemos que sacar del sistema" dijo la comisaria, "a los seudoagricultores. Los que tiene una cabra en el huerto de su casa no son agricultores".
La comisión presentará la propuesta en la próxima primavera y confía en que se apruebe por el Consejo de Ministros de Agricultura a finales de 2008 y "podría entrar en vigor inmediatamente". La propuesta, a pesar de ser más moderada que la de su antecesor que proponía limitar las subvenciones a 300.000 euros, ya tuvo ayer su primera réplica por parte de Jean Michel Lemétayer, presidente del poderoso FNSA francés, que manifestó que la letra y el espíritu de la comisaria Mariann Fischer Boel no dan respuesta a la globalización y a sus consecuencias.
La propuesta de la comisión prevé también cambiar "el barbecho obligatorio" para poder dar más movilidad a las tierras y fomentar los cultivos más respetuosos con el medio ambiente. Se pretende que la agricultura europea contribuya más que los otros sectores a la reducción de gases de efecto invernadero, especialmente gracias a la mejora de los métodos de producción, con utilización más racional de los abonos y disminución del número de bovinos.
La comisaria europea manifestó también que con el actual nivel de precios, el sistema de intervención había quedado "obsoleto", pero que lo mantendría para el trigo panificable. El documento confirma los planes de Bruselas de eliminar las cuotas de leche que terminan en el año 2015.
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