Un informe foral desaconseja el lugar elegido para la nueva cárcel de Nanclares

Un informe elaborado por el Servicio de Medio Ambiente y Biodiversidad de la Diputación alavesa considera que el terreno elegido por Instituciones Penitenciarias para construir la nueva cárcel de Nanclares es "un lugar de especial protección que impide cualquier actuación urbanística, de modo que es legal y urbanísticamente imposible llevarla adelante". La dirección de Instituciones Penitenciarias, dependiente del Ministerio del Interior, considera este informe como uno más de los estudios que requiere el proyecto. "Todavía esperamos la valoración del departamento de Urbanismo y del propio Ayuntamiento de Nanclares", señalaron fuentes de la dirección general.

Mikel Mintegi, diputado de Medio Ambiente, de EA, apunta que "sería todo un atropello" seguir adelante con la idea de la nueva cárcel. El Ministerio de Interior abrió un procedimiento de reclasificación urbanística del terreno donde pretende levantar la nueva cárcel, lo cual implica un proceso de evaluación conjunta de impacto ambiental, contexto en el que el servicio de medio ambiente foral elaboró su informe. Para Instituciones Penitenciarias, este texto sólo indica que el terreno "debe ser objeto de conservación frente a desarrollos urbanísticos, y no frente a una construcción de interés general".

La nueva prisión, que prevé abrir sus puertas en 2010, se levantará en una parcela de 502.000 metros cuadrados con una superficie construida de 81.427 metros cuadrados. La zona es un antiguo terreno militar, ya descatalogado, del llamado Polvorín de Zaballa. Tendrá cuatro plantas y contará con diez módulos residenciales que sumarán 720 celdas, otro de régimen cerrado con 36 celdas, otro de ingresos, salidas y tránsito con 56 celdas y uno más de enfermería con 64 camas.