Etxeberria frena la angustia

¿No hay gol o no hay goleadores en el Athletic? Hasta ahora. el debate en San Mamés se resume en esa frase lapidaria, de las que tanto se usan en el fútbol para salir del paso. "Es que el equipo no tiene gol". Todos los equipos tienen gol. Hasta los más defensivos. Hasta los más rácanos. Hasta los más capellianos o bilardistas. Lo que no tienen algunos equipos es goleadores... y por eso no tienen gol. El Athletic los va quemando poco a poco y no se adivinan demasiados recambios. El Recreativo ni los tiene ni se le presumen.

Ayer se reivindicó Etxeberria, precisamente el día que cumplía 400 partidos con la camiseta rojiblanca, el tercer futbolista con más partidos tras Iribar y Rojo (casi nada). Y se reivindicaba tras un prolongado desierto que parecía anunciar su jubilación forzosa. Etxeberria celebró su cuarto centenario con la primera victoria de la temporada del Athletic en San Mamés. Lo hizo con colocación, con pillería, con saber estar, con una versión reducida, pero eficaz, del mejor goleador actual del Athletic. El resto sigue aprendiendo.

El Recreativo es un equipo debilísimo en la defensa, que tuvo la gallardía de no acularse en el área y tirar la línea muy lejos de su portero, Sorrentino. Pero es una defensa melosa, a la que le cuesta correr hacia atrás, lo que facilitaba las llegadas del Athletic con una facilidad pasmosa. Le facilitaba sobre todo las ocasiones soñadas, las de empujar, la de poner el interior del pie y ajustar el golpe. Por dos veces Aduriz, el goleador (cuatro tantos en Liga) malgastó sus balas. Una la tiró mansa contra el cuerpo de Sorrentino. La segunda insistió en el error, a dos metros del portero del Recre, que tropezó con el balón, tras un libre indirecto magnífico de Orbaiz. ¿Falta de gol o falta de goleadores? Aduriz, el más acreditado, vivía ayer una confusión permanente: lento en el remate, acelerado en el pase. Susaeta, con muchas más complicaciones, largó un disparo con clase que rozó el poste. Un posible penalti de Sorrentino a Aduriz zanjó veinte minutos intensos para dar paso a una languidez absoluta que el Recreativo apenas rompía con la intimidación de Sinama Pongolle, que incluso llegó a disparar a puerta. Fue noticia.

Pero la noticia de verdad fue la de Etxeberria. Primero aprovechó un magnífico pase de Iraola, un pase elegante, y después un fallo clamoroso de Sorrentino, que se dejó ganar un salto por Aduriz. Lo mejor del Recre lo dio Marquitos en apenas unos minutos. En el Athletic volvió Yeste y con un taconazo se ganó a la grada. Etxeberria ya se duchaba.