"Todo esto es muy triste"

La pequeña localidad de Polop (4.000 habitantes) retomó ayer el pulso a la actividad municipal con la elección de Juan Cano, del PP, como nuevo alcalde. Cano sustituye al ex regidor Alejandro Ponsoda, de la misma formación política, que fue tiroteado el pasado 18 de octubre cuando se disponía a entrar con su coche en el garaje de su casa. Recibió dos balazos, uno de ellos en el cráneo, y falleció el día 27 en el hospital General de Alicante, al que fue trasalado tras sufrir la agresión.

Juan Cano tomó la vara de mando en un pleno extraordinario marcado por la tristeza que aún reflejan en sus rostros los vecinos de este pueblo del interior de la Marina Baixa. El clima generalizado de pesar llevó a los concejales a eludir el debate político en la sesión. "Todo esto es muy triste. Alejandro [el regidor asesinado] era una buena persona y queremos saber quién y por qué lo mataron", resumió Ángel Rodríguez, un vecino de la localidad, de 77 años, al término del pleno extraordinario.

El nuevo colegio del pueblo llevará el nombre del alcalde asesinado

"Mi repulsa por la muerte de un hombre bueno", escribe un vecino

La elección del nuevo primer edil se produjo sin que la investigación haya resuelto las dos claves del brutal crimen de Alejandro Ponsoda, es decir, el móvil del asesinato y la autoría del mortal tiroteo contra el ex regidor a las puertas de su domicilio particular.

Por imperativo legal, el pleno para la designación de nuevo primer edil por fallecimiento del titular debe celebrarse en el plazo máximo de diez días. La Corporación de Polop cumplió con el precepto y a las 13 horas de ayer se celebró el pleno extraordinario. Antes del inicio de la sesión, los asistentes, entre ellos un centenar de vecinos, guardaron un minuto de silencio en memoria del desaparecido primer edil. A continuación, José Valero, que ocupó el séptimo puesto en la lista del PP en los comicios del pasado mes de mayo, tomó posesión del acta de concejal en sustitución de Ponsoda.

La designación de Juan Cano también fue un mero trámite, dada la mayoría absoluta del Grupo Popular (seis ediles). Los dos grupos de la oposición, el PSPV (tres concejales) y el Grupo Independiente (dos ediles) renunciaron a presentar candidato alternativo a la alcaldía y se abstuvieron en la elección del nuevo regidor.

El nuevo alcalde, responsable del área de Urbanismo y Hacienda bajo en el gobierno de Ponsoda, se limitó a tomar posesión de la vara de mando y a pronunciar un breve discurso de agradecimiento a los vecinos y a sus compañeros de partido. "Trabajaré por el pueblo y estaré abierto a todas las propuestas y demandas que me planteen los vecinos", dijo Cano, quien excusó su breve alocución en el "sentimiento de pesar y tristeza general que reina en la población".

Cano igualmente declinó hacer comentarios sobre la composición de su nuevo equipo de gobierno y anunció que una de sus primeras iniciativas será dar el nombre de Alejandro Ponsoda al nuevo centro educativo que se construye en la población.

La sesión plenaria concluyó dentro del mismo ambiente de tristeza y pesar con el que comenzó. Los vecinos abandonaban cabizbajos la casa consistorial, no sin antes echar un último vistazo al tablón de anuncios de la Corporación. El panel rebosa desde el pasado día 18 de octubre de escritos en los que los vecinos e instituciones públicas daban primero ánimos a Ponsoda, cuando se debatía entre la vida y la muerte en el hospital, y, más tarde, tras su fallecimiento, denuncian el brutal crimen: "Para mi alcalde. Te he hecho un dibujo de un hada y un corazón para que te pongas contento y vuelvas pronto. Un besito", recoge un escrito firmado por la niña Marina Herrero. "Mi repulsa por los hechos y por la muerte de un hombre bueno", reza otro firmado por Antonio.

Dos semanas después del crimen que costó la vida a Alejandro Ponsoda, la investigación no ha esclarecido los hechos. Los agentes, encabezados por la unidad de la policía judicial que resolvió el crimen del alcalde de Fago, indagan en una doble vertiente: de un lado el ámbito de la vida pública del ex regidor, especialmente en las decisiones del Consistorio relacionadas con el desarrollo urbanístico de la localidad; y por otra parte, los aspectos relacionados con su vida privada. Fuentes cercanas a la investigación han señalado a este periódico que las pesquisas policiales no descartan ninguna hipótesis y auguran que la investigación se prolongarán por espacio de varios días.