Dos clínicas de Lugo empiezan a aplicar la ley de incompatibilidades
Las dos clínicas privadas de Lugo, Polusa y Virgen de los Ojos Grandes, que tienen conciertos con la Consellería de Sanidade no pueden atender desde el pasado lunes a pacientes procedentes del Sergas con personal que trabaje a la vez en estas residencias y en la sanidad pública. La medida surge de la aplicación de la ley de incompatibilidades que está en vigor desde 1984, pero que en Lugo no se estaba aplicando. Las autoridades sanitarias locales reconocen que esta medida puede incrementar "ligeramente" las listas de espera.
El pasado 3 de septiembre se renovaron los convenios de los dos centros privados con el Sergas en Lugo, lo que aprovecharon las autoridades sanitarias para implantar, también en esta provincia, la ley de incompatibilidades, que, según el director provincial del Sergas, José Luís Rodríguez, en otras provincias como Pontevedra o A Coruña, ya se hizo efectiva hace tiempo.
Rodríguez reconoció que no se podrá mantener el mismo nivel de desvío de pacientes hacia Polusa y Virgen de los Ojos Grandes, con 130 camas entre ambos centros, por lo que también admitió que las listas de espera pueden sufrir "un ligero incremento" en los centros de la sanidad pública.
Lo mismo opina el delegado provincial de Sanidade, Miguel Ángel Rodríguez, quien asume la posibilidad de "un incremento puntual" de las listas de espera en algunas especialidades, aunque afirmó que cuentan con mecanismos para hacer frente a esta posible situación. Rodríguez contempla la posibilidad de seguir operando en las clínicas privadas con profesionales del propio Sergas. "Nosotros pagaríamos el alquiler de las instalaciones, pero el profesional sería del Servicio Galego de Saúde", sostuvo.
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