Un motorista muere tras ser atropellado dos veces en la A-4

Javier Morales Tejera, un motorista vecino de Villa de Vallecas, de 29 años, murió ayer en la autovía de Andalucía (A-4) tras ser arrollado por un coche que, supuestamente, se dio a la fuga. Una furgoneta que venía detrás volvió a atropellar al hombre y lo arrastró unos 20 metros. El motorista murió en el acto a consecuencia de las graves lesiones que sufrió, según un portavoz de Emergencias 112.

Morales trabajaba como gruista en la construcción de un centro comercial de Aranjuez, próximo al futuro hospital de la localidad. Había salido de su casa, en la zona de Congosto, para llegar a las ocho a su puesto. Pero en el camino sufrió un accidente mortal. Ocurrió sobre las 7.45 a la altura del kilómetro 19,500, en los carriles de salida de la capital, en el término municipal de Pinto.

Por causas aún no esclarecidas, la moto que conducía Morales, una Honda CBR-900 (de gran cilindrada), chocó con un vehículo que, presuntamente, se dio a la fuga tras arrollar al hombre. Una furgoneta marca Renault que circulaba detrás volvió a atropellarlo y arrastró a la víctima unos 20 metros. Cuando el conductor paró en el carril central de la autovía A-4, Morales estaba caído junto a la rueda trasera derecha de la furgoneta.

La moto, que continuó circulando unos 30 metros, quedó tendida delante de la furgoneta. La Guardia Civil localizó el casco del motorista a un kilómetro del lugar del accidente, en el arcén derecho de la autovía. Posiblemente lo llevaron hasta allí los coches que circulaban por la autovía, según los agentes.

Uno de los primeros que se enteraron del accidente de Morales fue su amigo y compañero de trabajo Óscar López. Cuando llegó a Aranjuez, uno de los jefes le dijo que había visto un accidente en la A-4 y que la moto podría ser la de Javier. El amigo se subió a su motocicleta y fue al lugar del accidente. "Sí, lamentablemente, era él. El cuerpo estaba todavía debajo de la furgoneta, tapado con una sábana", explicó Óscar López.

"Todo lo que pueda decir de él era poco. Era una persona muy responsable, un trabajador nato que siempre estaba buscando la manera de ganarse la vida", destacó López. El fallecido había vivido la mayor parte de su vida en Leganés, donde será enterrado hoy o mañana. Hace unos cinco años se había instalado con su novia en Villa de Vallecas. Era el segundo de tres hermanos.

Una persona tranquila

"Su gran pasión eran las motos. Le encantaban, pero siempre de forma tranquila, sin hacer las locuras que se ven a veces. A él le gustaba disfrutar de la carretera y salía muchas veces los fines de semana a hacer rutas", destacó su compañero. "Desde luego, nunca hacía el cabra ni iba haciendo eses", concluyó López.

El destacamento de tráfico de la Guardia Civil de Valdemoro investiga el accidente e intenta localizar al conductor que supuestamente embistió al motorista y huyó tras el accidente.

En el último mes han muerto siete motoristas en las carreteras madrileñas, incluyendo el accidente de ayer. Los días más trágicos se vivieron el domingo 22 y el lunes 23 de septiembre, cuando perdieron la vida cuatro motoristas en menos de 24 horas. La víctima más joven ha sido el conductor de un ciclomotor de 14 años que falleció el pasado viernes al chocar frontalmente con un turismo en el kilómetro 7 de la carretera M-241, en el término municipal de Estremera. Un acompañante resultó herido grave en el choque.