Nueva escala en París

El Showroom Barcelona afronta su tercera edición en París con el objetivo de consolidar la marca Barcelona en la semana de la moda francesa. En una antigua fábrica de hierro reconstruida de la capital francesa, 12 diseñadores afincados en Barcelona exponen sus prendas para verano 2008 hasta el próximo martes esperando atraer la atención de compradores y prensa internacional. Showroom Barcelona ha dejado de ser un experimento para convertirse en una apuesta estable que cuenta con una financiación pública de 430.000 euros para cada edición. Sin embargo, la organización sigue pidiendo tiempo para hacerse un hueco en una ciudad como París. Cifras, de momento, más bien pocas.

Los diseñadores esperan que este fin de semana sea el plato fuerte. "París es una plaza difícil que requiere perseverancia. Cada vez se vende más que el año anterior. La tendencia es creciente", afirmó ayer el secretario de Comercio y Turismo, Emili Valdero. Showroom Barcelona tiene fecha confirmada hasta 2009 y no se descarta realizar otros espacios similares, por ejemplo, en Nueva York e incluso un Showroom dedicado al hombre. La segunda edición facturó alrededor de 200.000 euros.

El Showroom ha dado un fruto ya tangible. Algunos de los diseñadores que participan -como Oscar León, Lucía Blanco, Teresa Helbig, Txell Miras, Míriam Ponsa, entre otros- han decidido constituirse por su cuenta dando paso a una nueva generación bajo el nombre de Barcelona Diseñadores Independientes. Entre sus objetivos está montar un espacio profesional y colectivo en Barcelona. "Somos 20 diseñadores que queremos hacer fuerza conjunta. Uno de los puntos de nuestros estatutos dice que funcionaremos por nuestros medios y no sólo con subvenciones", afirmó Óscar León, presidente de la asociación. Lejos queda la Pasarela Gaudí.

De los 12 diseñadores sólo uno desfilará hoy en París. José Castro toma el Carrusel del Louvre por segundo año. "Es necesario desfilar en París. Yo veo el fruto que está teniendo", afirmó este gallego que lleva desde 1996 en Barcelona. Castro no sólo tiene colección propia, sino que trabaja como diseñador para la marca Desigual. "Tengo ganas de perturbar", comentó con ironía. Los diseñadores que participan en el Showroom Barcelona son Cecilia Sorensen, José Castro, Juan Pedro López, Lucía Blanco, Mariana Méndez, Míriam Ponsa, Óscar León, Parnasse, Teresa Helbig, The Avant, Txell Miras y Zazo & Brull.

Y entre los nombres que ya tienen su firma en París está el de Josep Font. El catalán dará el salto a la alta costura el próximo mes de enero. Todo un reto. Font, con tienda, en París, presentó su colección el pasado miércoles convirtiendo su espacio parisino de la Rue Sourdiere en un jardín africano. De vuelta a Barcelona, Font ya está manos a la obra. "Estamos muy contentos. A priori, suena un poco raro lo de la alta costura porque es un club muy cerrado", explicó ayer Font, quien recibió la invitación de la Federación Francesa de Alta Costura. "Es un sueño desde hace años. Hay que ser valiente y yo acepto con mucha ilusión".