Márquez y la plaga de lesiones
El mexicano sufre una rotura muscular y, en principio, será baja de cuatro a seis semanas
Márquez duró seis minutos sobre el terreno de juego del Gottlieb-Daimler Stadion. Iba a sacar Messi de banda y el jugador mexicano cayó sobre el césped agarrándose el tobillo de su pierna derecha. El pasado viernes, un comunicado de los servicios médicos del Barcelona esgrimió molestias en el tendón de Aquiles del pie derecho para justificar su ausencia en el campo del Levante. Ayer, Márquez se rompió el sóleo de la pierna derecha. Le reemplazó Puyol, que tampoco pudo terminar el partido.
Puyol marcó su segundo gol en la Liga de Campeones -había anotado el primero la pasada temporada ante el Levski de Sofía- y abrió el camino de la importante victoria del Barcelona en Alemania. Pero en el minuto 64 el capitán azulgrana también tuvo que retirarse. Regresaba de una lesión y el cansancio le pasó factura, pero su percance no es grave: se le cargó el gemelo y probablemente pueda jugar el próximo domingo ante el Atlético de Madrid si así lo dispone Frank Rijkaard. Lo de Márquez es peor: entre cuatro y seis semanas de baja estará el mexicano.
Llueve sobre mojado en el Barcelona y sólo se lleva un mes de competición: Ronaldinho se perdió tres partidos por culpa de una dolencia muscular, Touré se rompió el bíceps femoral ante el Zaragoza y estará un mes de baja, Zambrotta sufrió una rotura fibrilar contra el Zaragoza y también tiene para un mes, Milito no pudo jugar ayer por molestias en los abductores y anoche se lesionó Márquez. Consecuentemente, la lesión del mexicano enciende la señal de alarma en la enfermería del Camp Nou. Hay incluso quien vuelve a cuestionar la preparación física del equipo.
Aunque el diagnóstico sobre Márquez -molestias en el tendón de Aquiles- y la lesión, rotura de un músculo muy cercano al tobillo, pudieran dar que pensar en un mal diagnóstico, la hipótesis carece de sentido viniendo del doctor Ricard Pruna, que, atendiendo a los antecedentes, nunca se equivoca. "Curiosamente, todos los lesionados han jugado con sus selecciones", recordó un miembro del cuerpo técnico, que, como hizo Txiki Begiristain, director deportivo del club, se remitió al apretado calendario para justificar tantas lesiones. "La culpa es de un calendario infernal", dijo el guipuzcoano.
"No se trata de buscar culpables", aseguró Rijkaard en la sala de prensa del estadio de Stuttgart cuando se le preguntó por el cúmulo de jugadores con molestias musculares antes de anunciar que la lesión de Márquez le obliga a buscar soluciones a la carencia de medios centro. "Sería conveniente que los futbolistas también comunicaran a tiempo sus sensaciones para evitar males mayores", había pedido la vispera el entrenador. Lo hizo Milito y se quedó en la grada. En principio, el central argentino estará también listo para reaparecer el domingo ante el Atlético.
Rijkaard reconoció que debe retocar el equipo porque ayer perdió a Márquez, que al menos estará un mes de baja, Touré también tienen para cuatro semanas y Edmilson está lejos de reaparecer, aunque ultima su puesta a punto en Brasil, donde se recupera de una intervención quirúrgica de rodilla. Rijkaard se queda sin medio centro para unos cuantos partidos, puesto que, curiosamente, todos estos jugadores ocupan dicha posición. Ayer, de entrada, con Puyol en el banquillo y Milito en la grada, Márquez jugó seis minutos como central, al lado de Thuram, mientras que Deco, Iniesta y Xavi ocuparon el centro del campo, un reparto de papeles que puede tener continuidad en los próximos partidos por imperativo del guión. La ventaja es que Iniesta puede jugar de todo y eso facilita el trabajo al holandés, que ayer elogió al centrocampista manchego.
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